Estos son los cementerios imperdibles en España: para un viaje exprés diferente
En Madrid, el cementerio de La Almudena, creado en 1884, es uno de los más grandes de Europa, con 120 hectáreas y cerca de 5 millones de sepulturas.
Explorar los cementerios históricos de España ofrece una experiencia cultural única y sorprendente. En el norte de España, por ejemplo, el cementerio de San Amaro en A Coruña, inaugurado en 1813, se divide en tres zonas: religiosa, civil y británica. Este último fue adquirido en 1867 por el cónsul británico en Galicia para enterrar a los ciudadanos británicos fallecidos en la región.
Aquí se pueden encontrar ejemplos de neoclasicismo y simbología celta, además de las tumbas de más de 200 personajes ilustres, incluida la hermana pequeña de Pablo Picasso. En Lugo, el cementerio de San Froilán, cercano a la ruta del Camino de Santiago, alberga monumentos en memoria de los soldados repatriados de la guerra de Cuba de 1898.
En Avilés, el cementerio municipal de La Carriona, inaugurado en 1890, es casi un museo al aire libre con un Centro de Interpretación que organiza visitas guiadas para apreciar su valor artístico4. La riqueza de sus sepulturas y monumentos escultóricos refleja la prosperidad de los indianos, emigrantes que regresaron de América5. En Santander, el cementerio de Ciriego, inaugurado en 1893, muestra las tendencias del arte funerario de finales del siglo XIX. Entre sus esculturas y obras funerarias más significativas, se encuentran los restos de la famosa artista Carmen Amaya.
El cementerio municipal de Bilbao, situado entre Derio y Zamudio, destaca por su monumental entrada y su conjunto de arte funerario, con hasta 90 panteones y capillas de estilo modernista o neogótico6. En Donostia-San Sebastián, el cementerio de Polloe, inaugurado en 1878, es el principal de los tres cementerios de la ciudad. Aquí se encuentran las tumbas de personajes ilustres como el pintor Ignacio Zuloaga y la política Clara Campoamor.
En Madrid, el cementerio de La Almudena, creado en 1884, es uno de los más grandes de Europa, con 120 hectáreas y cerca de 5 millones de sepulturas. Sus panteones, capillas y monumentos funerarios ofrecen muestras artísticas de estilos diversos como neogótico, neoclásico y neorromántico. Aquí descansan políticos y destacados personajes de la cultura española como Lola Flores, Benito Pérez Galdós y Santiago Ramón y Cajal.
Cataluña cuenta con diez cementerios incluidos en la Ruta Europea de Cementerios, destacando el estilo modernista. En Barcelona, el cementerio de Poble Nou y el de Montjuïc son imperdibles. En el primero, abundan los mausoleos y esculturas de gran calidad artística, mientras que en el segundo se encuentra la mayor colección de carrozas fúnebres de Europa y las tumbas de famosos artistas como Joan Miró e Isaac Albéniz.
A menos de una hora en coche de Barcelona, se pueden visitar otros cementerios modernistas como el de San Sebastián de Sitges, Arenys de Mar, Vilafranca del Penedés, Igualada, Terrassa y los Capuchinos de Mataró. En la provincia de Girona, destaca el cementerio modernista de Lloret de Mar, y en Tarragona, el de Reus, el primer cementerio laico del país, inaugurado en 1870.
En Valencia, el Cementerio General alberga la pirámide de la Familia Llovera, una construcción neo-egipcia única, y el Patio de los Pórticos, formado por 170 columnas dóricas construidas en 1880. El proyecto Museo del Silencio ofrece cuatro itinerarios para conocer su historia y patrimonio funerario. En Alcoy, el cementerio de San Antonio Abad cuenta con galerías subterráneas únicas en España y un recinto para militares y religiosos.
En Andalucía, el cementerio de Nuestra Señora de la Salud en Córdoba, construido en 1811, alberga las tumbas de famosos toreros como Manolete. En Monturque, el cementerio es el único en España con una zona arqueológica en su interior, con cisternas romanas ocultas durante más de mil años.
En Granada, el cementerio municipal de San José forma parte del entorno monumental de la Alhambra y conserva restos arqueológicos del palacio árabe de Alixares. En Málaga, el cementerio Inglés, creado en 1831, es el camposanto protestante más antiguo de España, con monumentos funerarios y tumbas de inspiración clásica, neogótica y modernista.
