Esto es lo que te puede pasar si utilizas los mismos calcetines durante muchos días seguidos
Dos expertas explican lo caro que puede salirte seguir esos pasos.
Con toda probabilidad no eres de esas personas que repetirían prenda de ropa dos días seguidos. Claro, pero hay días en los que pasa. Y seguro que tampoco eres de esos que repiten ropa interior. Claro, pero hay momentos muy concretos y excepcionales en los que puede ocurrir -sobre todo con la cesta de la ropa sucia a rebosar-. Pero seguro que sí que no eres de los que son capaces de llevar los mismos calcetines durante más de dos días. ¿O si?
Si te sientes identificado con el primer párrafo deberías saber que llevar los mismos calcetines durante día tiene un precio más allá de la falta de higiene. Así lo detallan dos expertas en la materia, en declaraciones al medio finés Ilta Sanomat.
Se trata de la explicación de la podóloga y enfermera comunitaria Sirpa Kive y a la experta en el hogar de Marttaliito, Niina Silander. Y sí, lo primero que tienen que confirmar es muy obvio. Hay que cambiarse todos los días de calcetines. Pero lo verdaderamente significativo de esta información es qué ocurre si no lo haces.
¿Qué riesgos tienes si llevas los mismos calcetines varios días?
"Los textiles que están directamente en contacto con la piel se cambian diariamente por otros limpios. El propósito de los calcetines es mantener los pies calientes y, si se usan incluso durante 12 horas, acumulan suciedad y ya no absorben la humedad. Por lo tanto, los calcetines sucios no calientan tanto como los limpios", explica Silander.
Todo ello puede llevarte al desenlace más negativo. "En el peor de los casos, exponerte a enfermedades de los pies", añade Kive, la podóloga. "Un calcetín que se ensucia durante el día no es la única causa de enfermedad, pero el propio estado de salud o la mala suerte combinados con calcetines sucios pueden aumentar el riesgo de infecciones en los pies", desgrana esta especialista.
Además, influye en gran medida la edad de la persona en cuestión. "A medida que envejecemos, la circulación sanguínea en las piernas disminuye y la piel se vuelve más fina, por lo que la resistencia de la piel es más débil y más susceptible a las infecciones", detalla Kivi, anticipando uno de los grandes problemas: "Es posible que haya estado expuesto a hongos en las uñas y los pies al estar descalzo en el gimnasio o en la piscina, por lo que el riesgo de hongos en las uñas y la piel aumenta si la piel no está intacta".