Encuentran bajo tierra el castillo perdido de Enrique VIII
Los restos del palacio llevaban más de cinco siglos 'desaparecidos'.
Hace unos días se produjo un acontecimiento histórico y de una magnitud inimaginable en Inglaterra. Gracias al trabajo de un grupo de arqueólogos e historiadores, se logró dar con el primer castillo utilizado por Enrique VIII hace más de 500 años.
Pese a los intentos por hallarlo durante cinco siglos, no ha sido hasta este año 2023 cuando al fin, y tras un anuncio de Sociedad Histórica y de Preservación de Collyweston (CHAPS), se podrá testar cómo se desarrolló la actividad familiar de los Tudor en el lugar.
Durante su reinado, fue un monarca muy cuestionado debido a sus polémicas actuaciones, entre ellas, gastos desmesurados e intentos frustrados a la hora de conquistar nuevos territorios, como Francia.
De esta forma, la noticia que dejó en shock a todo el país fue el descubrimiento del castillo en la localidad de Collyweston, en Northamptonshire tras más de cinco años de investigación -pese a la falta de ayudas estatales y la pandemia de por medio-.
Los restos del castillo fueron hallados después de que, debido a las actividades de excavación y limpieza, surgieran desde la superficie paredes de roca hundida. Fue en ese momento cuando los investigadores y lugareños comenzaron a creer que era el castillo de Margaret Beaufort, abuela de Enrique y primera 'inquilina' de los Tudor.
Pero el castillo encontrado no fue solo el lugar de residencia de Enrique VIII, ya que durante el siglo XVI, concretamente en el año 1541, tuvo entre sus paredes a tres reyes: Enrique VIII, Isabel I y Catalina Howard.
Expectación tras 500 años 'desaparecido'
En palabras de los historiadores e investigadores de la CHAPS a Daily Mirror, "los rumores locales siempre decían que aquí había un área llamada 'los jardines del palacio'", pero que "nadie tenía idea de cómo de grande era".
En este sentido, apuntaron que la construcción se trataba de un complejo de megamansiones muy representativas del 'estilo Tudor' y que cuenta con más de 300 metros alrededor del exterior.
Como no puede ser de tora forma, y tras más de 500 años 'desaparecido', el castillo se encuentra totalmente en ruinas de acuerdo con las informaciones e imágenes publicadas por los propios investigadores, pero que después de tantos siglos, lograron todo un hito histórico para la corona inglesa.