Empieza el día con un premio de 5 millones de euros de la lotería y lo termina con una petición de 6 años de cárcel

En julio de 2012, una administración de A Coruña vendió un boleto de la Primitiva que resultó ganador. El afortunado podría haberse llevado 4,7 millones de euros, sin embargo, nunca llegó a reclamarlo.

Según publica el medio Sport, esta situación llevó a la Justicia a iniciar la búsqueda del propietario del boleto. "El lotero que vendió el número ganador afirmó haber encontrado el billete olvidado en su local", pero "la historia tomó un giro totalmente inesperado".

Manuel Roija, el lotero en cuestión, "se vio envuelto en una trama judicial cuando la Fiscalía presentó una condena de seis años en su contra". "Se le imputa de un delito de estafa o, en su defecto, de apropiación indebida".

Según la Fiscalía, "el lotero, conocedor del alto importe del premio, habría decidido guardárselo para sí, junto con otros boletos, sin comunicar al apostante que su boleto estaba premiado". Además, "no le devolvió el resguardo ni el comprobante expedido por el terminal, convenciéndola de que no había obtenido ningún premio y privándolo así de la posibilidad de cobrarlo". 

Roija llegó a solicitar el premio hasta en seis ocasiones desde que supo que estaba premiado, pero todas sus peticiones fueron denegadas por Loterías y Apuestas del Estado. "Este giro inesperado añade un toque de suspense a una historia que comenzó con la esperanza de un premio millonario y ahora se desenvuelve en los tribunales con acusaciones de estafa y apropiación indebida", concluye la publicación.