El sorprendente hallazgo 'futurista' en un yacimiento de 5.000 años de antigüedad
Revela un nivel de sofisticación arquitectónica en las sociedades neolíticas inimaginable hasta el momento.
Una reciente excavación en Dinamarca ha descubierto un nivel de sofisticación arquitectónica en las sociedades neolíticas inimaginable hasta el momento. En la isla de Falster, un equipo de arqueólogos, liderado por Marie Brinch del Museo Lolland-Falster, ha desenterrado un sótano pavimentado de aproximadamente 5.000 años de antigüedad, lo que supone un claro salto en la tecnología de la construcción en la antigua Escandinavia.
Hace casi 6.000 años, la cultura del vaso de embudo lideró un cambio hacia la agricultura y la domesticación de animales en Escandinavia, alejándose de su previo estilo de vida de cazadores-recolectores para dar paso uno más sedentario. En esta transición se llevaron a cabo las construcciones de las primeras casas en la región, así como de tumbas megalíticas y estructuras masivas similares.
Con esta cultura del vaso de embudo se relacionan las excavaciones arqueológicas en el yacimiento de Nygårdsvej 3, en Dinamarca, donde han aparecido los restos de varias de esas antiguas casas con postes interiores que sirven de soporte a un gran tejado.
"En el interior de dos fases de viviendas superpuestas se registró una zona rebajada, que se había construido con guijarros de diferentes tamaños. La disposición y la forma de la característica indicaban claramente un origen antropogénico y se entiende que pertenece a una de las fases de la vivienda. En consecuencia, se interpreta como un sótano", explican los científicos de la investigación, publicada en la revista Radiocarbon.
Los suelos del sótano, que mide 2 por 1,5 metros y tiene una profundidad de 40 cm, parecen estar hechos de una mezcla compacta de arena y arcilla llamada marga, que sigue siendo el material de suelo utilizado en casi mil millones de hogares en la actualidad. Se trata de una tecnología de vanguardia para la Edad de Piedra.
Lugar estratégico
El yacimiento Nygårdsvej 3 parece haber sido construido estratégicamente a unos 600 metros del límite norte de la aldea de Eskilstrup con una ligera elevación que otorga una buena vista del área circundante y mantenía el lugar por encima de la zona de inundación de los pantanos y arroyos cercanos para que no fuera afectado.
Además de las estructuras arquitectónicas, los arqueólogos también encontraron cerca de 1.000 artefactos, entre los que se incluyen herramientas de sílex, fragmentos de cerámica y huesos quemados o fósiles de erizos de mar.
Es posible que esta formación subterránea tuviera una temperatura más estable, ya que estaba aislada de los cambios meteorológicos estacionales, y que sirviera como almacén de alimentos, manteniéndolos frescos en verano y evitando que se congelaran en invierno, afirman los científicos.