Detienen a 22 activistas de Futuro Vegetal por causar daños por valor de 500.000 euros

Una operación simultánea en distintos puntos de España se ha saldado con la detención de 22 activistas climáticos agrupados en el colectivo Futuro Vegetal. El dispositivo, a cargo de la Policía Nacional, también ha incluido el arresto de los tres considerados como los líderes de la agrupación que denuncia la inacción contra el cambio climático. Según la investigación, asumían roles directivos y recibían remuneraciones por sus responsabilidades.

En este sentido, los detenidos están acusados de conformar una estructura criminal y causar daños al patrimonio valorados en 500.000 euros, según ha informado este viernes la Jefatura Superior de la Policía de Madrid. En ese medio millón de euros no están cuantificados los daños causados a obras artísticas en acciones del colectivo. Concretamente, se les acusa de los delitos de pertenencia a organización criminal, daños, daños contra el patrimonio histórico, contra la seguridad vial y del tráfico aéreo, atentado a agente de la autoridad y desórdenes públicos.

Así, los arrestos se han reproducido en las siguientes ciudades: Madrid, Barcelona, Cádiz, Murcia, Elda (Alicante), Zaragoza, Granada, Valencia, Soria, Santander y San Sebastián. Todos ellos forman parte de la investigación iniciada en enero de 2022, después de que varios activistas arrojasen pintura contra la fachada del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación en Madrid -emblemático edificio conocido por las estatuas cariátides que lo custodian-.

Acusados de 65 hechos delictivos: lanzamiento de pintura a edificios y ataques a obras de arte

Futuro Vegetal es uno de los mayores representantes del movimiento climático que emplea técnicas como el lanzamiento de pintura en sus acciones o el ataque a obras de arte en museos como vía para reclamar la atención mediática. En este sentido, la Policía acusa a la veintena de arrestados de un total de 65 hechos delictivos.

Entre estos últimos se encuentran el lanzamiento de pintura a las fachadas del Congreso  y otros edificios -incluidos los icónicos leones-, el corte de la circulación en carreteras de circunvalación de Madrid -por el peligro que entrañó para los usuarios-, daños a obras artísticas del Museo del Prado y otros bienes privados, así como el acceso a las pistas de los aeropuertos de Ibiza y Madrid-Barajas, provocando el cierre temporal de las mismas.