Descubren la procedencia de un misterioso sonido que se escucha en las profundidades del océano

Descubren la procedencia de un misterioso sonido que se escucha en las profundidades del océano

Después de más de dos décadas de investigaciones, un equipo de científicos estadounidense confirma uno de los misterios del Pacífico.

Un ejemplar de la ballena Bryde en el Océano Índico.Michael Valos

La ballena de Bryde (Balaenoptera brydei) viaja largas distancias por el océano Pacífico y su canto, que emite para comunicarse con otros miembro de su especie, retumba en las profundidades del mar. 

Este sonido ha sido misterioso hasta 2014, cuando fue grabado por primera vez y según la revista especializada estadounidense Science Alert, su descubrimiento ha servido para comprender las poblaciones de ballenas y cómo se mueven por las profundidades del mar. 

"Las ballenas de Bryde se encuentran en todo el mundo en aguas tropicales templadas y cálidas, pero su estructura y movimientos son poco conocidos", cuenta en el mismo medio Ann Allen, oceanógrafa de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, en sus siglas en inglés) en Hawaii y encargada de coordinar esta investigación.

"Nuestros resultados proporcionan evidencia de una población pelágica de ballenas de Bryde en el Pacífico norte con una amplia distribución pero con variaciones estacionales e interanuales en su aparición", explica.

Se sabe que el océano no es un remanso de silencio, pero los misteriosos sonidos, llamados biotwangs (sonido mecánico por encima de una determinada frecuencia) han sido un enigma particular. 

Se escucharon por primera vez en las Islas Marianas durante un estudio de sondeo autónomo realizado por la Universidad Estatal de Oregón. Dos años más tarde, los científicos concluyeron que se trataba del canto de una especie de ballena. Y dos décadas más tarde, se ha confirmado. 

Durante un estudio de esta misma entidad científica en 2018, los investigadores avistaron 10 ballenas de Bryde individuales y registraron biotwangs que parecían estar relacionados con nueve de ellas.

Utilizando grabadores acústicos de larga duración, situados en las costas de Estados Unidos, la agencia estaba pendiente de los sonidos que emitían estas poblaciones de mamíferos marinos en lugares remotos. 

Las ondas sonoras viajan más lejos a través del agua que a través de la atmósfera, por lo que los investigadores pueden catalogar una amplia variedad de información acústica de los océanos.

Los registradores que han estado en funcionamiento durante más de veinte años han producido una cantidad increíble de datos. Para examinarlo todo y encontrar las señales que buscaban.

Además, el equipo de investigadores diseño un algoritmo de Google para poder analizar todos estos datos. Gracias a la IA, pudimos hacerlo en horas en lugar de años", publica la NOAA en su página web.

“Identificamos una presencia estacional constante de biotwangs sólo en las Islas Marianas y al este de la Isla Wake. Esto sugiere que este canto puede ser una llamada específica de una población de ballenas de Bryde en el Pacífico Norte occidental", concluyen los expertos.

En cuanto a los próximos pasos, los científicos esperan descubrir nuevas formas de proteger a los asombrosos gigantes que habitan los océanos del planeta.