Descubren un nuevo planeta gigante con la densidad de un algodón de azúcar
Es un 50% más grande que Júpiter, pero siete veces menos masivo.
Un equipo internacional de astrofísicos, liderado por investigadores del Laboratorio EXOTIC de la Universidad de Lieja, ha descubierto uno de los exoplanetas más extraños de los cuales hay registro. Se trata del planeta WASP-193b, cuya densidad es tan baja que se compara con el algodón de azúcar y que orbita una estrella distante similar al Sol.
Segundo planeta menos denso
Situado a una distancia de 1.200 años luz de la Tierra, la mayor peculiaridad de WASP-193b es que, pese a ser un 50% más grande que Júpiter, es siete veces menos masivo, lo que le confiere una densidad extremadamente baja. "WASP-193b es el segundo planeta menos denso descubierto hasta la fecha, después de Kepler-51d, que es mucho más pequeño", explica el investigador Khalid Barkaoui, primer autor del artículo publicado en Nature Astronomy.
"Su bajísima densidad lo convierte en una auténtica anomalía entre los más de cinco mil exoplanetas descubiertos hasta la fecha. Esta densidad extremadamente baja no puede reproducirse mediante modelos estándar de gigantes gaseosos irradiados, ni siquiera bajo el supuesto poco realista de una estructura sin núcleo", explicó.
Así, el planeta es tan liviano que es "básicamente extremadamente esponjoso" porque está formado principalmente por gases ligeros en lugar de sólidos. De ahí que los astrónomos lo hayan comparado con la densidad de un algodón de azúcar, ya que ese cuerpo celeste tiene una densidad de 0.059 gramos por centímetro cúbico, mientras que la del dulce está alrededor de 0.05 gramos por centímetro cúbico.
Método
El hallazgo se ha realizado a través del proyecto SuperWASP (Wide Angle Search for Planets), una colaboración internacional de instituciones académicas que operaban juntas dos observatorios robóticos, uno en el hemisferio norte y el otro en el sur. Cada observatorio utilizó una serie de cámaras de gran angular para medir el brillo de miles de estrellas individuales en todo el cielo.
Con datos tomados entre 2006 y 2008, y nuevamente entre 2011 y 2012, el observatorio WASP-Sur detectó tránsitos periódicos, o caídas de luz, de la estrella WASP-193. Estas caídas periódicas de brillo de la estrella eran consistentes con un planeta que pasaba frente a la estrella cada 6,25 días. Los científicos midieron la cantidad de luz que el planeta bloqueaba en cada tránsito, lo que les dio una estimación del tamaño del planeta.
Luego, el equipo utilizó los observatorios TRAPPIST-South y SPECULOOS-South, dirigidos por Michaël Gillon, astrofísico de la Universidad de Lieja, ubicados en el desierto de Atacama en Chile, para medir la señal planetaria en diferentes longitudes de onda y validar la naturaleza planetaria del objeto eclipsante.
También emplearon observaciones espectroscópicas recopiladas por los espectrógrafos HARPS y CORALIE, también ubicados en Chile (ESO), para medir la masa del planeta.