Descubren un efecto secundario inesperado en esta vacuna: quieren probarla con un millón de personas para entender su potencial
En el ensayo participarán más de un millón de personas.

La compañía farmacéutica GSK trabaja para lanzar un estudio a gran escala en el Reino Unido, para probar si su vacuna contra el herpes zóster puede reducir el riesgo de demencia. El fabricante británico analizará los datos de 1,4 millones de personas de entre 65 y 66 años durante un periodo de cuatro años a partir de 2023.
Según publica el medio húngaro Portfolio, el estudio sólo analizó los datos ya existentes, por lo que sólo pudieron mostrar correlaciones probables, no relaciones causales. En declaraciones recogidas por el diario, Tony Wood, director de GSK, afirmó que un ensayo clínico tradicional y aleatorio en el que participan 1,4 millones de personas sería "extremadamente caro". Sin embargo, "la especificidad del programa de vacunación contra el herpes zóster permite realizar un estudio de aleatorización natural".
De acuerdo a la información difundida, el examen tiene en cuenta, entre otras cosas, la edad, el sexo y otras enfermedades preexistentes. "En caso de resultados positivos, GSK puede negociar con las autoridades reguladoras para ampliar el alcance de la vacuna". La investigación se está llevando a cabo en colaboración con el Instituto de Investigación de la Demencia del Reino Unido y Health Data Research UK.
"Según el programa, que se amplió en 2023, las personas de 65 años pasaron a ser elegibles para la vacuna Shingrix, mientras que las de 66 años deben esperar hasta los 70", concluye la publicación. "Esto da como resultado dos grandes grupos naturalmente distintos para el estudio".