Aparca mal el coche y deja una nota a la policía: "Ten piedad, estoy en un examen"
La búsqueda de aparcamiento en Roma y el drama de un examen universitario
La eterna dificultad de encontrar aparcamiento en Roma ha vuelto a ser tema de conversación, esta vez protagonizada por un estudiante de Derecho en apuros. La escena es bien conocida: la urgencia por llegar a la universidad para presentar el temido examen de Procedimiento Civil, uno de los más difíciles del plan de estudios, y la falta de estacionamiento que empeora minuto a minuto. La ansiedad aumenta hasta que, finalmente, el estudiante deja el coche mal aparcado en la calle, arriesgándose a una multa o, incluso, a que le retiren el vehículo.
En este contexto, hace pocos días, un automovilista decidió apelar a la compasión de los agentes de tráfico y de los transeúntes, dejando un curioso mensaje en el parabrisas: "Estoy haciendo el examen de Procedimiento Civil. Por favor, tengan piedad". El mensaje iba acompañado de un número de teléfono y el clásico "llego enseguida".
El cartel rápidamente se hizo viral en redes sociales, después de que la página de Facebook The Roman Post lo compartiera el viernes por la tarde. En poco tiempo, acumuló decenas de comentarios y más de 200 “me gusta”. Uno de los usuarios comentó: "Sería interesante saber si le pusieron la multa. Y, si encima le fue mal en el examen, pobre, vaya día". Otra persona escribió: "¡Justificado de antemano!", mientras que algunos usuarios, con tono irónico, rebautizaron la prueba como "Procedimiento INcivile".
Si bien no está claro si el mensaje logró evitar la multa, esta no es la primera vez que un cartel de este tipo se vuelve noticia en Roma. En marzo, una larga carta fue colocada bajo el limpiaparabrisas de un coche que llevaba semanas aparcado en un espacio para discapacitados en Trastevere. Y en mayo, un grupo de personas llegó a "poner la mesa" sobre el capó de un SUV estacionado entre las mesas de un restaurante en la zona de Tuscolana. Son historias del caos urbano de la capital italiana, aunque en este caso sin ninguna "justificación académica".