El aeropuerto con menos recursos del mundo: no tiene ni luz
Se encuentra al aire libre y está compuesto por carpas.
Aeropuertos que llaman la atención hay muchos, como el de Gibraltar, cuya pista termina en el mar o el de la isla de San Martín (ubicada en el mar Caribe), donde uno de los extremos de la pista colinda con una playa en la que los bañistas pueden ver aterrizar los aviones a poco más de un metro.
Sin embargo, ningún aeropuerto es tan rudimentario como el de Arusha (Tanzania). Tal y como detalla y enseña en un vídeo el usuario de TikTok edennoa97, el mismo se encuentra al aire libre y sus diferentes departamentos están conformados por carpas.
A diferencia del resto de aeropuertos, en Arusha las maletas no se entregan en una cinta transportadora, sino que la acción se produce de forma manual. Es decir, un empleado del aeropuerto se encarga de acercar el equipaje de cada viajero a la carpa que está dedicada a ese fin.
Por otro lado, en la grabación se puede observar cómo ciertas partes del aeropuerto son de tierra y no de asfalto. En cuanto a la terminal de embarque (una de las zonas que por motivos de seguridad es más importante en un aeropuerto), el patrón del resto de la infraestructura se mantiene y está formada por una carpa y una mesa.
En cuanto a la sala de espera, cabe destacar que sí que cuenta con una importante cantidad de sillas para que los pasajeros puedan descansar mientras que aguardan a que su vuelo despegue.
Pese a la sencillez de las instalaciones, al igual que en la mayoría de aeropuertos también hay tiendas duty free (establecimientos libres de impuestos). No obstante, su aspecto recuerda más a un mercadillo que a las tiendas de este tipo que suelen observarse en otros aeropuertos.
En cualquier caso, lo más llamativo del aeropuerto de Arusha es que ni siquiera cuenta con luces, por lo que no se pueden operar vuelos nocturnos. De hecho, el usuario de TikTok narra en el vídeo que “nuestro vuelo se atrasó y nos avisaron de que no íbamos a volar porque no hay luz en el aeropuerto después de la seis de la tarde”.