Adiós a sorpresas okupas en verano: el secreto que usan los bancos para evitar que entren en tu vivienda

La okupación de viviendas constituye, en los últimos tiempos, una preocupación en aumento tanto para entidades bancarias como para propietarios particulares, aunque sin duda alguna, son estas primeras las que más tienen que enfrentar a esta problemática, ya que gestionan ingentes cantidades de domicilios. 

Muchos de estos permanecen vacíos y requieren de una gran atención por parte de los bancos para que no sean usurpados u ocupados por grupos de personas, por lo que las técnicas para conseguir su objetivo han ido variando y mejorando con los años.

Muchos de ellos se centran en métodos tradicionales como contratar servicios de seguridad que incluyan vigilantes las 24 horas del día o diversas estrategias que, en muchos casos, no son todo lo eficaces que desearían. 

Sin embargo, actualmente se han desarrollado algunas técnicas más avanzadas y que hacen más difícil y costosa -en muchos casos, directamente imposibilitan- la entrada de okupas a los pisos vacíos de los bancos.

La más habitual y que ha adquirido una gran importancia es la de la instalación de bombines antibumping en las cerraduras de las casas. Estos son unos dispositivos de seguridad pensados y diseñados para que las cerraduras no puedan ser manipuladas mediante la utilización de llaves modificadas, método conocido como bumping.

Este se trata de uno de los más usados por los delincuentes para colarse en las viviendas, introduciendo una llave manipulada en la cerradura y golpeándola hasta forzar el mecanismo. De esta forma consiguen que la puerta se abra sin necesidad de forzarla visiblemente, por lo que las entidades bancarias han optado por atacar esta práctica concreta utilizada por los okupas, ya que es la más extendida.

Los sistemas antibumping cuentan con unos mecanismos internos muy complejos, que están constituidos por materiales reforzados que imposibilitan que esta práctica delictiva pueda conseguir su objetivo. Además de esto, los bombines cuentan con una especie de pines que bloquean el giro de la cerradura en caso de detectar una manipulación desconocida, además de ser resistentes a todo tipo de herramientas como taladros o formas de forzado.

Por si fuera poco, los bombines también cuentan con sistemas adicionales que protegen la estructura, como los anti-ganzúa o anti-extracción, que permiten una mayor seguridad del inmueble. Finalmente, hay que destacar que estos bombines no requieren ningún tipo de autorización o permiso para ser instalados en inmuebles y domicilios privados, aunque sí lo exigen para lugares públicos.