Abandona su trabajo porque le pica el gusanillo y ahora un email le acerca a ser el mejor profesor del mundo en Dubái
“Decidí que mi lugar tenía que estar aquí ayudando a los chicos, que esa gratificación no lo paga ningún dinero”, asegura el docente.

Ángel Luis González. Ese es el nombre del español que, a pesar de llevar únicamente tres años como docente, puede ser nombrado la próxima semana en Dubái como el mejor profesor del mundo.
Tal y como ha contado en el programa Herrera en COPE, recientemente le han comunicado a través de un email que se encuentra nominado en los premios Global Teacher Prize (los considerados Nobel de la educación).
La historia de Ángel Luis es bastante curiosa, ya que dejó su puesto de trabajo como ingeniero informático (en el que, como él mismo ha reconocido, ganaba más dinero que como profesor) para dedicarse a la docencia.
El origen de ese cambio en su vida le llegó a la edad de 29 años. Le encomendaron la misión de enseñar a profesores a utilizar el aula virtual que su empresa había desarrollado, algo para lo que recorrió más de 700 centros de Extremadura.
Fue en uno de ellos en el que le informaron de que al año siguiente iba a tener lugar una convocatoria de oposiciones para convertirse en profesor. Le picó el gusanillo y consiguió aprobarlas a la primera.
De esa forma, en 2021 comenzó a trabajar por primera vez con un grupo de jóvenes en un aula. Respecto a por qué cambió de profesión, Ángel Luis ha explicado que “decidí que mi lugar tenía que estar aquí ayudando a los chicos, que esa gratificación no lo paga ningún dinero”.
Los aspectos que hacen a Ángel Luis un profesor diferente
En cuanto a la situación actual de la Formación Profesional, donde él imparte clases, Ángel Luis ha expresado que “se empieza a valorar cada vez más la formación profesional, pero, cierto es que todavía sigue habiendo algún que otro prejuicio”.
En ese sentido, el profesor ha destacado que “yo lo que me encuentro siempre son chicos que sienten que no son buenos estudiantes, porque si lo fueran, no estarían ahí”.
Respecto a su forma de relacionarse con los alumnos, el decente ha precisado que “yo, sobre todo, me baso en el nivel de la red de exigencia, no somos conscientes el nivel de exigencia que tienen a día de hoy estos chicos. Parece que desde que cumplieron 8 o 9 años ya se les está obligando a elegir y a decidir qué tienen que ser de mayores”.
“Yo les quito mucha presión en esa línea y al final es como de verdad surgen estas vinculaciones. Tenemos alumnos que por suerte son mayores que ellos y digo, mira, está estudiando aquí, es mayor que tú, diciendo, no tiene ningún problema, la vida es mucho más larga”, ha resaltado Ángel Luis.