Sémper endurece su discurso en el Congreso tras las críticas internas
El portavoz del PP, que habló en euskera hace 48 horas, defiende entre aplausos de los suyos una enmienda contra que se hablen lenguas cooficiales en la cámara.
Hoy sí hubo aplausos. Hoy no se repitieron las caras de sorpresa en la bancada del PP. Hoy, Borja Sémper, portavoz de los populares en el debate de la reforma del reglamento del Congreso para incluir permitir el uso de lenguas cooficiales en el hemiciclo, sí ha contentado a los suyos. A todos.
Los aplausos fueron unánimes. Quienes torcían el gesto hace 48 horas, cuando Sémper osó hablar en euskera en parte de su discurso, hoy sonreían.
Tenía tremendo papel el vicesecretario de Cultura y Sociedad Abierta del PP, que recibió duras críticas internas tras utilizar el vasco en su intervención del martes en el hemiciclo durante el debate para la tramitación de la reforma del reglamento del Congreso.
El PP trató de explicarlo este miércoles, incluido el propio Sémper, que dijo que, con sus palabras en euskera, quiso visibilizar cómo se utilizaban habitualmente en el Parlamento estas lenguas sin necesidad de cambiar las reglas de la cámara.
Ahora Sémper ha tenido que salir a defender una enmienda del PP al articulado de la reforma, en la que recuerdan que "el idioma oficial del Congreso de los Diputados es el castellano" y que lo que busca esta modificación es "desactivar dicha oficialidad, contenida en el artículo 3.1 de la Constitución", ha explicado el propio partido en una nota.
Hoy, la ultraderecha no ha dejado el Pleno. De la boca de Sémper lo único vasco que salió fue un "egun on". Y ya. El resto, discurso más duro y directo contra el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y sus "cesiones" al independentismo catalán. "¿Cuál es el límite de cesiones para conseguir que Sánchez sea presidente? ¿Hay límites?", se ha preguntado al inicio de su alocución. "Todo aparece supeditado a la ambición de un sólo hombre".
"¿Justifica el poder el pago de cualquier precio? ¿De verdad? ¿Elevar a UE peticiones de imposible cumplimiento? ¿Condicionar la política exterior? ¿El poder justifica este desprestigio y este bochorno?", se ha seguido preguntando Sémper, que ha arrancado, esta vez sí, los aplausos de su bancada. De toda. También Cayetana Álvarez de Toledo.
El portavoz del PP ha criticado las formas en las que se ha producido esta reforma del reglamento, que comenzó a aplicarse este martes antes de su aprobación y ha asegurado que "las Cortes Generales ya permiten el uso de las lenguas cooficiales autonómicas". "Con naturalidad, en referencias, citas, frases, o párrafos breves autotraducidos. Y eso nunca ha sido un problema", ha afirmado.
Sémper ha aseverado que su partido va "a defender la Constitución en su forma y fondo" y que actuará "con la responsabilidad histórica del momento". El portavoz del PP ha defendido el espíritu de la Transición y del 78, y ha abogado por "superar la dinámica de bloques, la polarización, el enfrentamiento y la división".
Dardo a Sánchez por sus palabras sobre 2017
"¿Creen ustedes, como afirma Pedro Sánchez, que lo sucedido en 2017 en Cataluña fue una crisis que nunca debió derivar en una acción judicial? ¿O creen, por el contrario, que la defensa del Estado de Derecho y la aplicación del artículo 155 fue un acto democrático en defensa de la ley y la libertad de los catalanes? Esto segundo lo pensaban ustedes antes, lo primero lo piensan hoy. Eso sí, salvo que Pedro Sánchez cambie de opinión", ha concluido su discurso Sémper.
Tras la intervención del diputado socialista Marc Lamuà, que ha ironizado sobre la ausencia de euskera en la intervención de Sémper y ha instado a Vox a marcharse al bar, ya que su discurso ha sido en catalán, Sémper ha vuelto a tirar de críticas al PSOE por sus relaciones con el independentismo.
"¿En nombre de quién hablaba, del PSOE o de Junts? Porque usted ha pasado de grupo a grupo. Se presentó por Girona por una formación política, le dijo a los electores que votaban a una formación política, pero en esta cámara, el voto de sus electores se convirtió en un voto para Junts", ha esgrimido recordando cómo el PSOE cedió algunos diputados para que el partido de Puigdemont tuviera grupo propio en el Congreso.
"Ni usted ni nadie me va a decir a mí en qué lengua expresarme, porque creemos en la libertad", ha espetado un Sémper muy duro que, hoy sí, ha agradado a todos los suyos. "Hay tantas formas de sentirse español como españoles hay en este país", ha agregado.