Sánchez le enseña el espejo a Feijóo ante los ataques por la 'trama Koldo': "Somos iguales ante la ley, no ante la corrupción"

Se esperaba una sesión de alta tensión y el Congreso no ha defraudado a esa carta de presentación y al menú más previsible. La corrupción, con la 'trama Koldo' como eje central de los ataques de la derecha, ha centrado este miércoles el cara a cara entre el presidente del Gobierno y el líder de la oposición. Un Alberto Núñez Feijóo que arrancaba su intervención preguntando a Pedro Sánchez qué asuntos trataron él y su mujer con Víctor de Aldama, expresidente del Zamora y recientemente detenido acusado de participar en un entramado millonario de fraude en el IVA de hidrocarburos.

El presidente ha ido más allá y ha respondido directo con una frase que marcaría las pautas del cruce entre ambos líderes políticos: "Somos iguales ante la ley, por supuesto, pero ante los casos de corrupción, en absoluto". Sánchez no ha ocultado la suerte de mano dura que prometen contra cualquier persona del partido -en un momento en el que se da por caído completamente al exministro José Luis Ábalos tras su imputación- y ha indicado que "a diferencia de lo que hicieron cuando gobernaron España, hemos actuado con contundencia".

Recuperando parte del argumentario de los últimos dos días, el presidente del Gobierno, ha señalado que esa diferencia entre PSOE y PP a la hora actuar pasa por "colaborar con la justicia, con los cuerpos de seguridad del estado", y "a diferencia de lo que hacían [en  el PP], "creando policías patrióticas". Un recordatorio que llega tan solo un día después de que el expresidente valenciano y popular Eduardo Zaplana haya sido condenado por cobrar mordidas en el marco del 'caso Erial'.

También después de que tuvieran lugar las declaraciones sobre la 'Operación Cataluña' en la comisión de investigación, que contó con el ex DAO Eugenio Pino y el subsecretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez. Piezas clave en el proceso en el que también está investigado el que fuera ministro de Interior con Mariano Rajoy, Jorge Fernández Díaz, por presuntamente dirigir un grupo parapolicial en la sombra para espiar a rivales políticos.

Feijóo también ha replicado con contundencia. "Su actitud y su cara le delatan", le ha acusado, para referirse a las acciones judiciales de su esposa, Begoña Gómez, contra el juez instructor del caso, Juan Carlos Peinado, acusándole de supuestos delitos de revelación de actuaciones procesales declaradas secreto y otro continuado de prevaricación. "Colaborar con la justicia es ponerle dos querellas al juez que le investiga", ha valorado el presidente del PP.

El líder de la oposición acusó a Sánchez de haber llegado a la presidencia "Llegó como adalid contra la corrupción", indicó Feijóo, señalando que "se va con mote en trama", en alusión a las informaciones de que en el marco del 'caso Koldo', De Aldama se habría referido a Sánchez como "el número 1".   

"Sabía lo de Ábalos y le aforó", le espetó también, sin aportar prueba alguna, "sabía lo del rescate multimillonario de la compañía aérea y lo tapó", indicó nuevamente Feijóo, en un turno que también sacó a relucir "los lingotes de oro, las bolsas de Ferraz", en referencia a las revelaciones sobre el viaje que no pudo realizar la actual vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, por las sanciones comunitarias que pesaban sobre ella. 

Del renovado "¡márchese ya!" de Feijóo al 'Pasalapalabra' de Sánchez para recordar la corrupción en el PP

Un informe la Unidad Central Operativa (UCO) recogió un pantallazo en el que Ábalos informaba a Sánchez y él respondía con un escueto "bien". Eso sí, de la investigación de la UCO nada sobre maletas y oro. "¡Márchese ya!", expresó Feijóo -quien, curiosamente, protagonizó su intervención sin sus habituales gafas-, en un imperativo que es muy difícil que no evoque al clima del histórico "váyase, señor [Felipe] González, váyase" de José María Aznar.

Feijóo también ahondó en esa consigna popular de que el mismo PSOE que se aupó por una moción de censura contra la corrupción, ahora está sufriendo de la misma medicina que recibió el Ejecutivo de Rajoy en 2018. "Vinieron a combatir la corrupción y lo que hicieron es ejercitarla", criticó Feijóo con otro juego de palabras sobre la biografía de Sánchez: "Ya no es heroica su resistencia y su dimisión es de libro". 

Tampoco dejó pasar el expresidente de la Xunta la dependencia del Gobierno de otras formaciones -en un contexto en el que el PP asegura en público que el Ejecutivo está a punto de caer, pero admite entre los suyos que hasta puede haber presupuestos y que no tiene apoyos para una moción de censura: "Vinieron a combatir la corrupción y lo que hicieron es ejercitarla. Ya no es heroica su resistencia y su dimisión es de libro".

Por su parte, Sánchez puso el foco en el periódicamente cuestionado liderazgo de Feijóo en el PP, insistiendo en que el Gobierno de coalición acabará la legislatura y que las políticas continúan dando sus frutos, esgrimiendo los últimos datos del IPC que muestra a una inflación en picado -1,5% en septiembre- que ha logrado su nivel más bajo desde hace tres años.

"Quedan mil días de legislatura y usted y su equipo actúan como si quedaran dos días", ha expuesto con sarcasmo Sánchez, resumiendo que "nuestro planteamiento de aquí al año [20]27 es legar un país más próspero, y que como prueba "ahí están los datos de creación y empleo y [reducción] de la inflación".

Y antes de pasar a recordarle el horizonte y pasado judicial que ha tenido el PP en tribunales, ha insistido en que "en el PSOE quien la hace la paga, en el suyo se echa a la calle y se ensalza a quien tapa la corrupción, como ocurrió con el señor Casado". Y ha dejado su habitual punch line dialéctico para el final, una cuestión que en intervenciones posteriores repetirían la vicepresidenta María Jesús Montero o el ministro de Interior, Grande-Marlaska-: "Tápense un poco. De la 'A' de Ayuso a la 'Z' de Zaplana tienen un caso de corrupción para cada letra del abecedario".