Podemos achaca su debacle en Galicia a una campaña con "pocos recursos y medios"

Poca autocrítica en Podemos. La formación de Ione Belarra ha admitido este lunes que sus resultados en las elecciones gallegas, donde sólo obtuvo el 0,27% de los votos, son "elocuentes" - se ha evitado decir que son "malos" - y culpa al bloque progresista en su conjunto de "falta de valentía y ambición" para que la ciudadanía salga a votar.

En una rueda de prensa en la sede central del partido, el secretario de organización de Podemos, Pablo Fernández, ha achacado estos resultados a que la campaña del partido en estos comicios se ha hecho "con pocos recursos y medios". "En Galicia teníamos una situación complicada", se ha limitado a decir.

Fernández ha lamentado que la concentración del voto progresista en el BNG no haya evitado que "sea el PP de los recortes y el de la corrupción quien haya revalidado su mayoría absoluta y salga reforzado". "Es una pésima noticia tanto para Galicia como para el resto del país", ha dicho.

Y pese a quedar por detrás en votos de partidos minoritarios como Pacma, Podemos confía en cambiar su suerte en las elecciones vascas y europeas de los próximos meses. "Tenemos que hablar de las preocupaciones de la ciudadanía. Llevar seis meses hablando de la amnistía no beneficia. Es necesario poner en pie una izquierda transformadora, que movilice y que dé respuestas a la ciudadanía. Ese es el reto que afrontamos en los próximos meses", ha dicho Fernández.

El secretario de organización ha pedido en este sentido "dejar de hablar de nosotros mismos" para "ofrecer respuestas a la ciudadanía", lo que equivale también a no hablar de su guerra abierta con Sumar. Preguntado sobre si una alianza con la formación de Yolanda Díaz en este territorio hubiera cambiado las cosas, Fernández se ha limitado a decir que "cualquier otra fórmula" no habría impedido la mayoría absoluta cosechada por el PP.