La pregunta del 'millón': ERC define la compleja cuestión con la que sus bases decidirán si invisten a Illa
El preacuerdo firmado con el PSC quedaba a expensas de que la militancia republicana avalase el contenido, como ha venido advirtiendo la cúpula de ERC.
Es la pregunta del millón o, mejor dicho, la de muchos millones. ERC ya ha definido la pregunta con la que planteará a sus bases la propuesta de preacuerdo con el PSC para investir a Salvador Illa.
Este viernes, Esquerra planteará a sus cerca de 8.700 militantes si dan sus votos para que Illa sea el próximo presidente de la Generalitat de Cataluña en base a un pacto a tres bandas entre PSC, ERC y los Comuns. Este era el único escenario realista y posible tras las elecciones anticipadas del pasado 12-M.
Lo hará con una pregunta de difícil enunciado y que la Ejecutiva de ERC ha dado a conocer a dos días de la votación de sus bases: '¿Estás de acuerdo en que Esquerra Republicana vote a favor de la investidura del candidato socialista a cambio de la soberanía fiscal, la promoción y protección de la lengua catalana, la Convención Nacional para la resolución del conflicto político y el resto de medidas acordadas?'.
La consulta será telemática y presencial y como remarcan los cargos directivos de la formación independentista, el resultado será "vinculante". Las votaciones las organizará una empresa externa especialista en tecnología de bloques (blockchain), que también se encargará del recuento.
El postrer acuerdo con el PSC cuando expiraba el plazo evitar la repetición electoral coge a ERC en un momento de absoluta crisis interna y con la incógnita de qué dirección tomarán las bases.
El batacazo en la noche del 12-M del aún presidente y candidato, Pere Aragonès, obligó a su salida de los cargos del partido, a lo que se sumaron la división en la cúpula o la polémica por los carteles denigratorios contra los Maragall, situaciones que no han hecho sino acrecentar las tensiones internas.
También se reconoce dentro de ERC la "desconfianza" que generan los socialistas entre la militancia, como llegó a apuntar hace días la propia portavoz, Raquel Sans.