España retira a su embajadora en Argentina: ¿Qué significa y qué no?, ¿qué puede pasar ahora?
La decisión anunciada por Albares ante la falta de disculpas de Javier Milei eleva la tensión, pero no es en absoluto una ruptura de relaciones. Se abre un nuevo tiempo cuyas claves aclaramos.
Argentina lo venía negando, pero el "choque diplomático" existe. El Gobierno español ha endurecido su postura ante la falta de "disculpas públicas" de Javier Milei y ha decidido retirar "definitivamente" a su embajadora en Buenos Aires.
El movimiento supone una escalada a nivel internacional del evidente malestar de Madrid con Buenos Aires a raíz de las palabras de Milei sobre Pedro Sánchez y su esposa en un acto de Vox. Ya ese mismo domingo el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, llamó a consultas a la diplomática española y también convocó de urgencia al embajador argentino en Madrid, Roberto Bosch, dos citas a modo de 'aviso'.
En el encuentro con el enviado americano, Albares exigió que Milei pronunciara unas disculpas que no sólo no han llegado... sino que le han servido de acicate para seguir lanzando ataques verbales a Moncloa.
Desde la Casa Rosada insisten en que son "en tono menor" tras una "catarata de insultos" iniciados por las palabras de Óscar Puente sobre Milei... mientras Albares insiste en que "nosotros no hemos provocado esta escalada".
Lo primero: quién es la embajadora
La Embajada de España en Argentina no es precisamente un puesto fácil; no en vano en aquel país vive la mayor comunidad española en el extranjero, casi medio millón de ciudadanos, según en INE. Pero la sucesión de acontecimientos en las últimas horas ha puesto en el foco a la actual representante nacional en el país sudamericano.
María Jesús Alonso Jiménez (Madrid, 1956) es una diplomática de carrera que ejerce el cargo en Argentina desde 2022. Desde su formación inicial en Derecho, orientó su carrera hacia las relaciones internacionales, escalando en responsabilidades primero dentro del país, hasta participar en el Gabinete de la Presidencia, y posteriormente fuera de nuestras fronteras.
Argentina es el último de un largo listado de países donde ha representado a España. Primero fue parte de las delegaciones en Turquía, Países Bajos, Dinamarca y en la OTAN, antes de convertirse en embajadora.
Como cabeza de la institución, su primera experiencia llegó en Camerún (2005-2008). Años más tarde fue la embajadora en Ghana (2014-2017), destino que encadenó con Países Bajos (2018-2021). Desde su salida de territorio holandés es`(era, mejor dicho) la representante de España en Argentina, puesto que por ahora continuará sus funciones desde Madrid.
Qué supone retirar al embajador de un país
La retirada definitiva supone, según subrayan fuentes del Ejecutivo, que España no tiene ya embajador en Argentina, Por lo tanto, cuando en su momento se pueda superar la crisis diplomática y el Gobierno decida que España tenga embajador, no bastará con el regreso inmediato de la persona que ocupaba ese cargo hasta ahora.
Deberá iniciarse en consecuencia un nuevo proceso, con el nombramiento de un embajador, que podría ser quien ocupaba esa responsabilidad u otra persona distinta. Tras la designación, tendría que comunicarse a Argentina para que otorgue el plácet correspondiente.
Todo ello no tiene ahora mismo fechas, porque, como apunta EFE de fuentes gubernamentales, no hay demasiado optimismo con el carácter de Milei y su equipo para superar la controversia.
Qué no supone la retirada de un embajador
Pese a la tensión evidente, España y Argentina no han roto las relaciones diplomáticas, algo que remarcan a uno y otro lado. Esto sería el último eslabón de una cadena de desencuentros internacionales que aún tendría otro paso previo, la expulsión de los diplomáticos argentinos de territorio español.
Si esto ocurriera y el Gobierno decretase la expulsión del embajador argentino, este sería declarado persona non grata, si bien no se cerraría la embajada, que quedaría reducida como central de servicios para sus nacionales, sin relaciones políticas con España.
Este escenario llevaría a el choque a una dimensión radicalmente diferente, que sería aún mayor en caso de ruptura de relaciones, que sí incluye el cierre de las legaciones diplomáticas. Una situación crítica, más aún tratándose de dos países autocalificados como "hermanos" y con cuantiosísimas inversiones bilaterales.
Retirar un embajador propio tampoco significa cerrar la embajada en el país extranjero ni cerrar toda relación con la población española residente en ese país. En el caso de Argentina y hasta que no haya nuevo nombramiento, la delegación española quedará en manos del número dos, en calidad de encargado de negocios.
Qué otras medidas podría adoptar España
Las mismas voces del Ejecutivo recogidas por EFE señalan que se siguen barajando posibles medidas complementarias tras los ataques del mandatario argentino, sin concretar cuáles.
Otras de las opciones posibles, especialmente a sabiendas de que Javier Milei quiere regresar a Madrid justo dentro un mes, es declararle persona non grata o llegar a impedirle la entrada en España. Actuaciones que dispararían la tensión bilateral y por cuya gravedad Moncloa ahora mismo no quiere pronunciarse, emplazando a ver "cómo evolucionan los acontecimientos".
Javier Milei volverá a Madrid —si no hay problema mayor— el próximo 21 de junio, para recibir un premio del grupo liberal de estudios Instituto Juan de Mariana. La cita la confirmó este lunes la Casa Rosada pese a la tormenta y no incluiría reuniones con ninguna autoridad española, como tampoco hubo en su reciente visita por el acto de Vox.