Ayuso dice todo esto (y no es bueno) de la ley de vivienda, pero no aporta datos
Madrid no aplica medidas para controlar el precio, pero considera que la ley es lesiva.
La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha asegurado este martes de que la ley estatal de vivienda es "lesiva" para las competencias autonómicas", y ha provocado efectos "devastadores", ya que "ha multiplicado la ocupación, ha hundido la oferta del alquiler y ha aumentado los precios". Eso sí, no ha aportado ningún dato y ha obviado que su Ejecutivo no ha aplicado ninguna medida de las disponibles, salvo las obligatorias como las prórrogas de alquiler vulnerable o los cambios en los desahucios.
En la clausura de unas jornadas de vivienda y energía, organizadas por Madridiario, Diaz Ayuso ha cargado contra la ley de vivienda del Gobierno de Pedro Sánchez, una normativa que la Comunidad de Madrid ha recurrido ante el Tribunal Constitucional.
Precisamente, la corte de garantías ha avalado este martes la mayor parte de la ley, al cumplirse un año de su entrada en vigor, tras rechazar la mayoría de las impugnaciones a la norma efectuadas por la Junta de Andalucía, si bien anula el artículo que rige la vivienda protegida.
El Tribunal Constitucional salva la mayor parte de la norma, como la competencia del Estado para regular las condiciones básicas del ejercicio en plano de igualdad del derecho de acceso a una vivienda digna.
Aún tiene que pronunciarse sobre el recurso de la Comunidad de Madrid, ya admitido a trámite, y el del PP, el Parlamento de Cataluña y los Gobierno de Illes Balears y País Vasco.
Sobre la ley de vivienda, Díaz Ayuso ha afirmado que "es lesiva para las competencias autonómicas", ya que "impone" un modelo de gestión "que no ha sido refrendado por los ciudadanos en las urnas", y que "ha multiplicado la ocupación, ha hundido la oferta del alquiler y, por tanto, también ha aumentado los precios".
"Suena bonito, pero luego no funcionan esas medidas intervencionistas y esto es lo que pasa cuando desde las administraciones se toman medidas arbitrarias, que van contra el mercado que, bajo evidentes criterios de regulación, tiene que ser libre", ha opinado.
Díaz Ayuso ha comentado que, aunque los precios han aumentado en la región, no están "a los niveles" de otras capitales del mundo, y ha apuntado que existe un problema de mayor demanda y la falta de oferta, tras el aumento de la población en los últimos años.
Ayuso apenas aplica la ley en Madrid
Pese a la visión de Ayuso, lo cierto es que la Comunidad de Madrid apenas aplica la ley de vivienda en la región.
La Comunidad de Madrid solo aplica las normas imperativas para todas las comunidades autónomas. Es decir: aplicar limitaciones en las actualizaciones de renta, la prórroga extraordinaria de los contratos de alquiler para personas vulnerables, el cambio en los desahucios que se dilatan, o penalizar en el IBI a las viviendas que lleven más de dos años desocupadas.
A su alcance tiene poder declarar zonas tensionadas limitando el precio del alquiler o poder aplicar deducciones fiscales para los caseros para estimular el alquiler más barato que compensan la pérdida de ganancias percibidas por esa bajada de precio de la vivienda. Sin embargo, no lo aplica.
El caso de Barcelona
Cataluña aprobó una ley de vivienda en 2020 que pretendía regular los precios del alquiler en zonas del mercado tensionadas como la de la ciudad condal.
La ley estuvo vigente hasta marzo de 2022 cuando el Tribunal Constitucional tumbó parte de la ley por considerar parte del articulado como inconstitucional.
Sin embargo, si se tiene en cuenta lo que ocurrió entre septiembre de 2020 y marzo de 2022, el precio del alquiler en Barcelona se mantuvo en los 15,5 euros por metro cuadrado.
Una vez decaída la norma, el Observatorio Metropolitano de la Vivienda de Barcelona elaboró un estudio en julio de 2022 sobre los efectos de la ley catalana en el precio de la vivienda en la ciudad. El informe indica que al inicio de la reforma los precios disminuyeron, pero que después aumentaron ligeramente aunque siempre por debajo de los valores iniciales. Es decir, que el precio bajó levemente.
De hecho, el precio del alquiler en Barcelona durante este 2024 ha aumentado menos que el de Madrid durante ese último año.