'Altri': el proyecto estrella de la Xunta postFeijóo que pasa por triturar eucalipto y amenazar la ría
La factoría proyectada en Palas de Rei ocupará tanta superficie como la capital gallega. Necesitará tanta agua al día como la provincia de Lugo y ha puesto en jaque a vecinos y sector marisquero. Bienvenidos a la primera gran iniciativa industrial tras la mayoría absoluta de Rueda.
"No podemos dejar pasar esta oportunidad que otros aprovecharán", Alfonso Rueda, presidente de la Xunta de Galicia y PPdeG, 21 de marzo de 2024.
En el mismo 2024 en el que la Unión Europea hace ondear la bandera de la transición ecológica y energética, de la Agenda 2030, de la pionera Ley de Restauración de la Naturaleza, de la lucha contra la sequía y la desertificación... —pausa para largo etcétera— un proyecto industrial ha hecho saltar las alarmas en Galicia y ha puesto en pie de guerra a un municipio cuyo nombre comenzará a sonar con —más— fuerza en los próximos meses.
A aquellos amantes del Camiño de Santiago quizás les suene el municipio lucense de Palas de Rei, una de sus más emblemáticas etapas a su paso por la comarca de A Ulloa, que atesora desde restos arqueológicos de la época de los castros a referentes arquitectónicos e históricos del románico. Pero en los últimos tiempos se ha venido hablando más de futuro que de pasado. Un futuro incierto que sobrevuela esta tierra bajo el nombre de la empresa portuguesa Altri.
Esta firma lusa dedicada a la producción de papel, madera y coproducción de energía trata de sacar adelante un macroproyecto para levantar una factoría para producir fibra textil —lyocell, tejido cuyo principal componente es la celulosa de madera— en el mencionado municipio lucense de poco más de tres mil habitantes. Sin embargo, lo que a priori se había defendido como un proyecto centrado en ese producto ha encendido el malestar y la indignación al conocer los datos definitivos y características que lo acompañan. Así es la primera gran iniciativa industrial que apoya la Xunta de la era post-Feijóo y la mayoría absoluta de Alfonso Rueda.
La 'carta de presentación': más terreno que Compostela, tanta agua al día como la provincia de Lugo
Para hacerse una idea de la dimensión del proyecto de Altri —un desembarco empresarial que se articula desde otra firma, Greenfiber, que a su vez engloba a una filial de Greenalia—, hay varios datos relevantes. El primero pasa por la ingente superficie de terreno que necesita. Esta factoría ocuparía 366 hectáreas, es decir, tanto como la extensión de la propia capital gallega, Santiago de Compostela. Y lo haría ante los lindes de una Zona de Especial Conservación (ZEC) de la Red Natura 2000, la ZEC ES11/0014 en la Serra do Careón.
Sin embargo, las verdaderas claves están en el agua y en el monte. Esta factoría consumiría 46.000 metros cúbicos de agua diarios, en su máximo caudal, del río Ulla. ¿Mucho?, ¿poco? Es más de lo que consume toda la población de toda la provincia de Lugo en un mismo día. Pero devolverá parte del agua, concretamente 30.000 metros cúbicos de aguas residuales que previamente habrán sido tratadas. Un tratamiento de cuya eficacia desconfían tanto buena parte de los vecinos como buena parte del sector marisquero de la ría de Arousa. Uno de los grandes motores de la economía gallega, a tan solo 137 kilómetros de la desembocadura del Ulla.
La otra gran pata del proyecto procede de la materia prima que necesita Altri para la viabilidad y rentabilidad del proyecto en Palas de Rei y que conforma el gran atractivo para que la pastera portuguesa fijase la vista en Galicia. El eucalipto. Esta especie arbórea originaria de Australia, pirófila y conocida por su capacidad de desertificación es el recurso que se necesita para fabricar tanto la pasta de papel como el lyocell -para hacer la fibra textil antes se necesita la pasta-. Se estima que la planta de Altri consumiría cerca de 1,2 millones de toneladas de eucalipto al año. Según La Voz de Galicia, el 18% de lo que se tala en la comunidad.
En la otra cara de la 'moneda', la económica, el proyecto que cuenta con una inversión de 900 millones de euros en su primera fase se calcula que generará 500 puestos de trabajo directos y 2.000 indirectos —limpieza, vigilancia, transporte, construcción, hostelería... según estimaciones de Altri—. En materia de producción, la planta tendrá una capacidad para generar 400.000 toneladas métricas de pasta secada al aire anuales y de 200.000 toneladas de lyocell. Eso cuando esté funcionando a pleno rendimiento, pues en una fase inicial se estima que serán 250.000 toneladas métricas de celulosa y 60.000 toneladas de lyocell. En un principio, cuando se dio a conocer el proyecto, solo se habló de la producción de fibra textil.
Podría parecer que este proyecto ha cogido por sorpresa, pero nada más lejos de lo contrario. La realidad es que la Xunta, ya con Alfonso Rueda a la cabeza tras el ascenso de Núñez Feijóo a la presidencia nacional del PP, lo declaró como proyecto industrial estratégico para Galicia en diciembre de 2022. Una medida que la propia Xunta reconoció que "permitirá la reducción a la mitad de los plazos —excepto los relativos a la presentación de solicitudes y recursos— manteniendo las garantías técnicas, jurídicas y ambientales". Ese plazo de presentación de alegaciones se abrió el pasado 5 de marzo —30 días—.
La plataforma: "No podían entender que el PP, siendo el máximo garante de la propiedad privada, se abre a expropiaciones"
Desde que tuvo lugar el anuncio de este proyecto hace unos dos años, una parte de los vecinos de A Ulloa comenzaron a mirar con recelo cada novedad que saltaba a titulares. Así comenzó a gestarse la plataforma Ulloa Viva que protesta contra las posibles consecuencias de la implantación de la factoría. Marta Gontá es portavoz de este colectivo, puramente vecinal, y explica en declaraciones a El HuffPost que la plataforma ni tiene signo político ni nació meramente de la implicación de asociaciones ecologistas —distintos colectivos de este corte han mostrado su repulsa al proyecto, como Greepeace o la Asociación pola Defensa da Ría—.
De hecho, Gontá recuerda que el Partido Popular goza de mayoría absoluta en Palas de Reis, una cuestión que choca con las sorpresa de algunos vecinos, votantes de los populares, ante unas declaraciones del mandatario gallego Alfonso Rueda, quien no descartó que se tenga que acudir a expropiaciones forzosas de terreno si no prosperan las compras voluntarias —no hay ningún terreno comprado hasta el momento—.
"Votantes de toda la vida del PP no podían entender que el PP, siendo el máximo garante de la propiedad privada, se abre a expropiarles. ¿No decían que había que evitar el comunismo?", explica, recordando cómo una persona le dijo en una reunión "'¡pero hay que llamar a Rueda!'" y ella le deslizó que el presidente estaba bien informado, pues él mismo lo había afirmado.
"Llevamos dos años pidiendo información a la Xunta, a Altri y al Concello de Palas. Hace un año y medio el Concello sí que nos atendió con un proyecto que hablaba de fibras textiles y que estaría dentro de una finca privada llamada Quinta de Reis, de 120 hectáreas", rememora Gontán indicando que a lo largo del año siguiente lo que "fuimos viendo en medios era una información que no concordaba para nada".
"En una segunda reunión, en la que ya no apareció ni Altri ni la Xunta ni el alcalde de Palas de Rei y además justo acababa de salir la información sobre la captación de aguas, donde pudimos tener acceso a la información real del proyecto", desgrana. Lo que se encontraron fue que "para llevar esto a cabo, necesitan una extensión de 330 hectáreas y una canalización de agua de 12,5 kilómetros que atraviesa la Red Natura 2000 y que deja a los propietarios de las fincas con una servidumbre de entre 6 y 10 metros de ancho".
Gontán también pone el foco en que esta factoría contaría con una chimenea de 75 metros de altura "que estaría echando gases contaminantes todos los días". Y remacha "estamos hablando de que esto estaría a menos de dos kilómetros del Camiño de Santiago, es una barbaridad, ¿quién va a querer hacer el Camiño al lado de una macrocelulosa apestando y con esas vistas? No tiene ni pies ni cabeza".
"Esta zona es una zona con datos excelentes de paro. De hecho, las empresas no encuentran trabajadores", señala también, recordando que el tejido empresarial en la zona se nutre fuertemente del sector agroganadero, del turístico y de pequeñas y medianas empresas. Precisamente, uno de los grandes temores de la plataforma es que se pierda terreno para el ganado y se acabe decantando la ganadería intensiva —macrogranjas—. "El problema que tenemos aquí es la falta de servicios y vivienda, que venga gente a trabajar, de hecho la migración está aumentando", apunta.
Gontán también lamenta la posición de la empresa en las charlas informativas para los vecinos que acabaron suspendiendo. "Por fin vinieron. ¿Cuál era la intención de la Plataforma Ulloa Viva? Simplemente que verbalizasen lo que pone en el estudio de impacto ambiental, pero no hubo manera. En vez de decir que usan madera de eucalipto ellos prefieren decir que la madera es de bosques certificados gallegos. Vienen aquí con un powerpoint de nivel de 3º de ESO a no aclarar nada, a hacer publicidad".
Sobre la lucha que emprenden contra el proyecto, tienen muy claro que no saldrá adelante, cueste lo que cueste: "No imos a dejar que Altri se quede ni con nuestro futuro, ni con el de nuestros hijos".
Altri dice que el agua se devolverá "con más calidad de la que fue captada" y advierte de la necesidad de fondos europeos
Greenfiber optó por suspender la serie de charlas informativas sobre el proyecto en los ayuntamientos afectados ante la presencia en esta de vecinos y particulares que mostraron su firme oposición al proyecto. Con todo, el pasado sábado, el director del proyecto de Altri en Palas de Rei, Bruno Dapena, habló largo y tendido del proyecto en las ondas de Cadena SER Galicia. Lo defendió asegurando que no habrá afectación a las aguas tras emplear un sistema de tecnología puntera y que no será necesario plantar más eucalipto.
"En el proceso productivo de Altri no se consume agua, se usa el agua. El agua es captada del río, es utilizada en el proceso productivo y se depura en condiciones muy similares a las que fue captada. En algunos casos con mejor calidad de la que fue captada y es devuelta al río", aseguró Dapena, indicando que "de la cantidad captada prácticamente se devuelve el 100%. Esos 46.000 metros cúbicos es un caudal de diseño".
Preguntado sobre los incidentes y expedientes en el país de origen de Altri, Dapena ha señalado que la firma nunca tuvo que pagar una sola multa por motivos de este tipo: "En Portugal apareció un vertido en el río Tajo, inicialmente se pensó que Altri podría haber sido el causante de ese vertido, se hizo una investigación y se demostró que Altri no tuvo ninguna participación y, de hecho, el caso se archivó y no hubo ninguna sanción económica".
Dapena también se enfrentó a la gran pregunta incómoda. Si realmente estamos ante un proyecto tan beneficioso e innovador, ¿por qué Altri no lo desarrolla en Portugal? País vecino en el que se estima que hay unas 810.000 hectáreas de eucalipto. "Primero, porque en Galicia se dan las condiciones. El primer condicionante, que es el que viabiliza a un proyecto de esta magnitud, es la materia prima de proximidad. Estamos previendo que en un radio promedio de 60 kilómetros abastezcamos el total de la madera", esgrimió Dapena. "El segundo es que tenemos uno de los sectores textiles, pues más pujantes, con lo cuál tendríamos también parte de los clientes aquí", añadió, sin concretar si se refería a Inditex.
Con todo, la otra gran clave pasa precisamente por donde podría encallar el proyecto de Altri. Un naufragio que podría producirse en Bruselas. El principal partido de la oposición en Galicia, el BNG ha advertido de que llevará esta cuestión en forma de sendas preguntas tanto al Europarlamento como la Comisión Europea para "saber si este proyecto incumple la normativa europea".
En este sentido, el director del proyecto ha confirmado que, para que este sea posible, la consecución de fondos europeos "es una condición sine qua non para que el proyecto salga adelante. Es un proyecto pionero, innovador, único en el mundo y requiere de un esfuerzo económico importante. Sin las ayudas públicas el proyecto no sería viable".