Descubren un agujero negro súper masivo fuera de control
El telescopio Hubble ha realizado un descubrimiento que ha maravillado a todo el mundo.
El telescopio espacial Hubble ha realizado un descubrimiento sin precedentes para el mundo de la astronomía: un agujero negro súpermasivo "rebelde". No se trata de algo único por su naturaleza sino por las dimensiones que posee, la velocidad a la que se desplaza y la capacidad de formación de estrellas que deja a su paso.
Según el nuevo estudio, el telescopio ha logrado detectar un agujero negro súpermasivo que, dadas sus características, no se asemeja a ninguno del que se tenga constancia.
"Es pura casualidad que hayamos tropezado con ella", afirma Pieter van Dokkum, astrónomo de Yale y autor del estudio. "Escanenado la imagen de Hubble me di cuenta de que teníamos una pequeña raya, y pensé que era un rayo cósmico golpeando el detector de la cámara. Pero al eliminar los rayos cósmicos, seguía ahí, no se parecía a nadie que hubiéramos visto antes", declaró.
Según indican os investigadores, se encontraban buscando un cúmulo globular cuando se produjo el descubrimiento. Se trata de un agujero negro con una masa 20 millones de veces mayor que la del Sol, y que avanza a una velocidad de cinco millones de kilómetros por hora; es decir, podría atravesar la distancia entre la Tierra a la Luna en unos 14 minutos.
Además, señalan que debido a la velocidad que alcanza, no "se traga nada", ya que para cuando cualquier materia cayera en el agujero, este se habría desplazado y con ello arrastraría el material a su estela.
Confirmar el descubrimiento
Todo ese material reunido ha provocado que se formen nuevas estrellas al tiempo que el agujero avanza por el universo. En estos momentos, aseguran que hay una cadena de estrellas enlazada durante 200.000 años luz desde el agujero hasta la galaxia de la que proviene.
Los investigadores sostienen que el agujero pudo surgir en esa galaxia, en la que había un sistema binario -de dos agujeros negros súpermasivos- y que la llegada de este tercero provocó la inestabilidad del sistema.
La idea a partir de ahora es repetir la observación con el telescopio James Webb y el Observatorio de Rayos X Chandra para comprobar si es correcta la visión e interpretación obtenida por Hubble.