Las cinco obras de teatro que no te puedes perder en marzo
Los estrenos propuestos son de esos en los que primeros espadas teatrales toman sus riesgos.
Dejen la calma teatral para otro mes. Este se presenta movidito. Más que el anterior si cabe. Convirtiendo esta sección en el más difícil todavía. Forzando a dejar fuera, por ejemplo, a Héctor Alterio y su A Buenos Aires, un íntimo y poético solo sobre el exilio con pianista incluido, que se verá en el Teatro del Barrio. Pero es que los estrenos propuestos son de esos en los que primeros espadas teatrales toman sus riesgos. Y eso siempre hay que destacarlo:
Fundamentalmente fantasías para la resistencia, Sanzol en estado puro
Sin duda todo el mundo querrá estar allí. Es lo nuevo de Sanzol. Escribe y dirige. Un estreno absoluto para hablar de cómo resistirse a una posible invasión de Putin. Una resistencia que se anuncia hecha desde el humor, que falta que hace, pues las noticias que llegan desde la Duma desde luego no son para alegrarse.
Para ello cuenta no solo con los recursos que un centro como el Dramático pone al servicio de los artistas, más a él que es su director artístico. Sino que cuenta con un elenco de morirse. Y que, por destacar a algunos actores y actrices, ahí están cómplices habituales suyos como Natalia Hernández, José Luis Lumbreras o Paco Déniz que ya supieron darle alegría a tu cuerpo Macarena en La Ternura, también de Sanzol, que todavía se puede ver en el Infanta Isabel. Y a los que se añade Javier Lara. ¡Cómo para perdérsela!
Del 24 de febrero al 16 de abril en el Teatro Valle-Inclán del #Dramático
Teatralia, el festival para todos los públicos, adultos incluidos
Sí, todos los meses hay un festival en Madrid. Este hay dos, Musas, mujeres en la escena en El Umbral de Primavera. Y el clásico Teatralia con un programa más largo y extenso que inundará la Comunidad de Madrid de obras para todos los públicos.
Entre los que destaca Ama. La terrible belleza de la compañía vasca Marie de Jongh. Que los que los siguen saben lo difícil que es conseguir entradas si no se está al loro. Y los que no, tienen la oportunidad para descubrir una compañía que se merece conocer.
A la que acompaña compañías como La ChicaCharcos y The Katiuskas Band y su concierto Con katiuskas y a lo loco. La Tartana teatro con El viaje de Isabella, la adaptación de una obra de Cervantes.
Como también será posible conocer a compañías de otras nacionalidades, y de las que no hay que asustarse, pues muchos de sus espectáculos son sin palabras. Teatros de objetos que juegan la baza de la poesía. Como La Salamandre y Un océano de amor. Y otros son en español, pero con otros acentos. Como Magdalena, la otra Frida de Mondomeraki que viene de México para contar la infancia de Frida Khalo.
Como hay mucho y bueno, y cerca de su casa, lo mejor es que cada uno se haga su selección.
Desde el 3 al 26 de marzo en varios teatros de Madrid
La nariz, siempre hay una primera vez
Desde que la recuperase el Metropolitan Opera House de Nueva York, esta ópera va camino de convertirse en parte del repertorio del siglo XX. De tal forma que pese a su complejidad, ochenta y nueve personajes que tienen que ser representados por treinta y tres cantantes, no hay teatro de ópera importante que más pronto o más tarde no trate de representarla.
Su éxito no es de extrañar por su historia. La de una nariz que decide emanciparse del cuerpo del oficial en el que se encuentra para tener su propia vida, para desarrollarse. Historia que pone de manifiesto la genialidad de su autor, el dramaturgo, novelista y cuentista ucranio Gogol. Historia a la que decidió poner música el genial compositor ruso Shostakovich mezclando música folclórica y popular de su época con la música atonal.
Este montaje, además, es atractivo por Mark Wigglesworth, su director musical. Un experto en música del siglo XX y contemporánea. Y por Barrie Kosky, su director de escena. Que ya ha triunfado con otros montajes en el Teatro Real y en Festival de Otoño de Madrid y que puso en órbita la Komische Oper de Berlín con su forma tan peculiar y atractiva de entender la puesta en escena de las óperas.
Con estos mimbres, no es de extrañar que Anne Igartiburu, que fue actriz antes que presentadora, se preste a ser la narradora de esta ópera. Y quedar para la historia como la actriz que la estrenó en Madrid. Porque este estreno, ya por sí mismo, es histórico.
Del 13 al 30 de marzo en el Teatro Real
Una imagen interior, el mejor teatro postdramático para estar a la última
Después de pasar el verano pasado por el Festival Grec de Barcelona y el mítico Festival de Avignon en Francia llega lo nuevo de El Conde de Torrefiel a Madrid. Viene por muy pocos días, lo que suele ser habitual. Su teatro se considera raro para un público masivo. Sin embargo, no hay profesional del teatro, de la crítica teatral o de los aficionados al teatro que se lo quiera perder. Motivos por el que conseguir entradas resulta más que difícil.
Así que aquellas personas que quiera disfrutar de esta reflexión de si es real la realidad tendrán que darse prisa para obtener asiento. Y, así, poder disfrutar de esa forma tan suya de construir un espectáculo en el que se mezclan textos, danza e imágenes con el objetivo de crear poesía y reflexión a la que no le falta ni la música ni el humor.
Desde el 16 al 19 de marzo en el Centro de Cultura Contemporánea de Condeduque
Amarte es un trabajo sucio (pero alguien tiene que hacerlo), para espíritus teatrales jóvenes
La llegada de una nueva obra de Guardamino al teatro debería ser todo un acontecimiento. Sobre todo, si llega después de una larga ausencia de los escenarios. Un autor y director teatral que para muchos será nuevo, pero para los que están en el día a día del teatro y para los más jóvenes, al menos en espíritu, es un referente.
Obras muchas veces con títulos tan chocantemente largos, como el de esta que se estrena a finales de marzo o como Este es un país libre y si no te gusta vete a Corea que se pudo ver en Nave 73. En las que plantea con acierto y, de nuevo, con humor (negro) controvertidos temas de actualidad: la educación, la religión, el amor, la democracia y, parece ser, en este nuevo montaje el mundo del trabajo.
Como es este caso. En el que ante la falta de horizontes laborales un veintañero decide enrolarse en una de esas empresas de reparto de comida o pequeñas cosas a domicilio. Mientras se plantea si esa decisión ha sido la mejor para su desarrollo profesional y personal.
Del 23 de marzo al 23 de abril en el Teatro Quique San Francisco.