Sólo en Europa se han detectado unos 12.000 casos de una enfermedad que ya se considera emergencia mundial. La OMS alerta: "Las vacunas por sí solas no acabarán" con ella.
Se ha iniciado la investigación epidemiológica relativa a búsqueda activa de casos y contactos y se ha decretado de forma preventiva el cierre del negocio.
La Comisión de Salud Pública ha acordado vacunar a quienes tengan prácticas sexuales de riesgo y a los contactos estrechos con peligro de enfermedad grave.
Se debate si administrar ya la segunda dosis de recuerdo o esperar a la llegada de los nuevos sueros actualizados a las variantes, que se prevé en septiembre.