Filipinas, un mes en la cuerda floja
Muchos supervivientes han muerto por tétanos después de sobrevivir al tifón, muchos niños han fallecido por un simple catarro: duermen a la intemperie, casi todas las casas han perdido el tejado y casi todos los días diluvia un rato. Y no hay cómo protegerse. Un mes después, sobrevivir sigue siendo tremendamente complicado para las gentes de la isla de Leyte.