La Guardia Civil de Granada vigila la fiesta que se celebra en terreno municipal y concentra a mil personas desde el día 30 de diciembre. Se espera que termine este martes.
Personas de distintos países europeos participan en la fiesta clandestina que comenzó el pasado viernes a orillas de un embalse. La Guardia Civil ha establecido controles de drogas y vigila el lugar con drones.