Puedes emocionarte al contarme por teléfono los 42 diseños que estás barajando para las invitaciones. Aunque te dé mi opinión porque necesitas ayuda para reducir las opciones, me seguirán dando igual. Cuando abra el buzón y reciba la mía, lo más probable es que acabe en la basura después de haberte dicho si voy o no.