"No sé cuándo regresaré al negocio, pero sí sé que mi foco en el futuro cercano estará en Washington", ha dicho, tras las críticas recibidas por conflicto de intereses.
La hija del presidente recurre a un vestido de Victoria Beckham para Target de apenas 18 dólares para escapar de las críticas de de gastar demasiado en ropa.