Al fiscal general del Estado lo nombra el Rey de España a propuesta del presidente del Gobierno. Siempre ha sido así con gobiernos del PP, del PSOE y hasta con los republicanos, si fuera el caso, tal y como dice la Constitución. El fiscal general del Estado ha explicado por qué ha borrado los mensajes dada la envergadura de la información que maneja y para proteger su intimidad. Imaginemos por un momento que las acusaciones populares ultras tuvieran información sobre terrorismo yihadista, por ejemplo. En fin. Menos mal que no pasó.