No obstante, la defensa del brasileño argumenta que las relaciones sexuales fueron consentidas debido a que la denunciante no presenta lesiones vaginales.
Los restos de semen hallados en las muestras intravaginales de la víctima pertenecen al futbolista, que siempre ha negado estos hechos en sus diferentes relatos.
Los abogados del futbolista defienden que no hubo "intimidación ambiental", ni "terror, pavor o dominación" como argumenta la joven que denunció la violación.
En el escrito de más de 20 páginas se reclama la salida de prisión, si fuera necesario con otras medidas cautelares menos gravosas, mientras se instruye la causa.
La rápida reacción de la seguridad de Sutton ante la violación que se imputa a Dani Alves revela el papel crucial de los protocolos en los lugares de ocio.
El exjugador del Barça ingresó este viernes en prisión sin fianza acusado de agredir sexualmente a una mujer en los baños de una discoteca de Barcelona.