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Cuando la resistencia es progreso y el cambio, reacción

Cuando la resistencia es progreso y el cambio, reacción

En una campaña electoral, lo que triunfa es el "espíritu de partido", que es una forma elegante de decir "el espíritu futbolístico": lo que importa es vencer. La idea de que los partidos políticos han hecho cambios en un país es una ilusión. Su misión es la contraria: resistirlos hasta donde sea posible.
Los cambios que no sabemos ver

Los cambios que no sabemos ver

Tenemos asumido que buena parte de nuestro éxito individual y colectivo depende de nuestra capacidad de adaptación a los cambios. Lo lógico sería entonces que estuviéramos muy entrenados para percibirlos cuando se inician y fuésemos capaces de prever sus consecuencias. No es así.
Nunca hemos sido modernos

Nunca hemos sido modernos

Nos creíamos modernos porque teníamos una sanidad que daba envidia y porque presumíamos de consumo en nuevas tecnologías, porque eran muchos los que llevaban sus hijos a la Universidad y por otras muchas cosas más. Nos lo creímos. Y ya no nos creemos ni a nosotros mismos.
Miedo al cambio

Miedo al cambio

Tanto en el plano individual como grupal para producir un cambio voluntario hacen falta tres elementos: SABER, QUERER Y PODER. Los dueños de los aparatos, las castas directivas de los partidos parecen no saber o no querer saber lo que es un clamor en la calle y en las encuestas; que una inmensa mayoría de españoles no confía en ellos.
Que no muera tu utopía

Que no muera tu utopía

No debemos dejarnos vencer. A pesar de la oscuridad que lo impregna todo, tenemos que seguir mirando al horizonte y ser conscientes de que existe otro futuro muy posible. Frente al mantra del "no hay alternativas" tenemos que recuperar la ilusión y ser conscientes de que la realidad será como nosotros queramos que sea.
¿Quién (no) vota al PP?

¿Quién (no) vota al PP?

"¿Qué ha pasado?"- nos preguntamos algunos - "¿Quién puede seguir votando al PP con la que está cayendo?". Es evidente que la percepción de que este partido carece de apoyos es hasta cierto punto falsa: hay muchos españoles que aún los apoyan ciegamente.