Esta nueva prueba coincide en pleno aumento de la tensión en la zona por la serie de ejercicios militares conjuntos que realizan EE.UU. y Cora del Sur.
Los mexicanos fueron los primeros a los que les llegó la invitación, pero del resto, que nadie se aflija sintiéndose excluido o plato de segunda mesa: tarde o temprano, a todos nos llegará nuestra tarjetita dorada, y entre todos acabaremos por pagar la factura completa de la fiesta de Trump.