Hijos, padres y redes sociales
¿Pueden los padres exponer a sus hijos menores en las Redes Sociales? ¿Dónde está el límite?
Un estudio que se hizo en 2010 revelaba que más del 90% de los niños estadounidenses habrían tenido una amplia presencia en las redes antes de cumplir los 2 años de edad, donde se mostraba desde el nacimiento y cumpleaños en Facebook hasta descripciones detalladas de problemas de conducta de los niños en algunos blogs de crianza.
Hay que tener en cuenta que como padres para nuestros hijos somos modelos de conducta, y eso nos lleva a el propio uso que hacemos los padres de Internet, principalmente en lo que se refiere a la privacidad de nuestros hijos.
Claves a tener en cuenta con las redes sociales y tus hijos menores:
- Considera que todas las publicaciones pueden ser públicas.
- Piensa a largo plazo. La información que publiques puede permanecer aproximadamente 10 ó 15 años en la red.
- No compartas en una red social lo que no le diría a una multitud.
- Respeta los deseos de tus hijos. Algunos niños son muy reservados, por tanto, deberían poder opinar sobre lo que se publica de ellos, incluyendo el poder de vetar ciertas publicaciones.
- Pide una segunda opinión. Antes de compartir historias personales sobre los niños, es recomendable que los padres pidan la opinión de otro miembro adulto de la familia.
- Comunica a otros familiares. Una vez que como padres hayáis establecido ciertas pautas a la hora de compartir información en la red social, debéis comunicarlas a otros familiares susceptibles de publicar sobre tus hijos.
- Infórmate. Existe una amplia variedad de recursos que pueden ayudar a los padres y familiares a formarse en el uso adecuado de Internet y redes sociales.
¿Cómo debemos educar a nuestros hijos en materia de nuevas tecnologías y redes sociales? ¿cómo trasmitir los peligros desde la educación?
A continuación te voy a dar una serie de pautas para que utilices con tus hijos con respecto a Internet y las redes sociales:
- Establece de manera consensuada junto a tus hijos el tiempo que necesitan estar conectados a Internet, incluyendo el tiempo de estudio y el de ocio acorde a su edad.
- Procura que haya un adulto en casa durante el horario de conexión del menor, con el fin de que pueda supervisar o dar soporte al menor cuando está conectado a Internet.
- Interésate por los hábitos de ocio de tus hijos, incluidos los relacionados con las redes sociales e Internet. Pídeles que sean ellos quienes te instruyan en alguna aplicación, qué ventajas tiene y cómo se utiliza.
- Coloca el ordenador en una zona de uso común. En caso de que no sea posible y sólo pueda ubicarse en la habitación de nuestro hijo, coloca la pantalla de manera que pueda verse desde la puerta.
- Navega y chatea de vez en cuando con tus hijos. Así podrá conocer sus hábitos y preferencias y creará un clima de mayor confianza entre ambos.
- Del mismo modo en que dices a tus hijos/as que no faciliten sus datos personales a desconocidos en la vida real, diles que no deben facilitar su dirección, números de teléfono ni datos personales por Internet.
- Déjales bien claro que hay ciertos comportamientos que pueden considerarse delitos y qué consecuencias legales tienen para ellos y para los vosotros como padres.
- Mientras sean menores sería recomendable que sepas las contraseñas de las cuentas en las RRSS de tus hijos, por si es necesario que lo supervises en una situación de sospecha de riesgo del bienestar de tu hijo.
- A cualquier edad, debes interesarte por los amigos de tus hijos/as. Esto incluye a los contactos del chat y de sus redes sociales.
- Conciénciales en la necesidad de no chatear con desconocidos. Se sabe que el 30% de los menores que chatean en Internet reciben algún tipo de provocación (sexual, de sectas o de incitación a conductas peligrosas).
- Pon los límites que establecería en cualquier otro ámbito de la vida.
- Trata de tener una buena comunicación con tu hijo/a para que te cuente si recibe algún tipo de información amenazadora o desagradable o si alguien que no conoce desee quedar con él.
- Trasmite que es importante mantener la educación y las buenas formas en Internet como en el resto de la vida. No hacer nada que no haría en la vida real, siempre expresarse de manera positiva, aceptar que los demás se equivocan, no gritar, no ofender, mostrar indiferencia ante los insultos o revisar lo que ha escrito antes de enviarlo, entre otras normas.
No todo es malo, la parte positiva de las redes sociales es que nos puede ayudar a resolver problemas y encontrar a personas, por ejemplo.
No evites la tecnología. Como padres no debemos renunciar a las redes sociales, ya que podrían beneficiarte del feedback positivo y el apoyo sano que se reciben al compartir publicaciones por Internet.