Lo mejor y lo peor de la tele del 2012
Bien, ante todo, definamos este post. Primero, no va a ser una crónica detallada, va a ser un repaso distendido, que estamos a final de año, y nadie, ni siquiera ustedes, quiere leer tratados sesudos.
Bien, ante todo, definamos este post. Primero, no va a ser una crónica detallada, va a ser un repaso distendido, que estamos a final de año, y nadie, ni siquiera ustedes, quiere leer tratados sesudos. Segundo, a quién va dirigido: a los espectadores generalistas, a esos que ven la tele que ve todo el mundo y que a lo mejor nunca han visto una serie de CULTO.
Y a los lectores que saben lo que significa la ironía: Mejor, a veces, no significa, de calidad...
LO MEJOR
Salvados. A ver quién es el que se atreve a negar que Jordi Évole y su equipo han recuperado el periodismo de investigación, haciéndolo accesible a todo el publico, incluido el que jamás vería un espacio sobre el fraude de las compañías eléctricas. Salvados, con humor y sabiduría, con naturalidad y un trabajo de campo exhaustivo, se lleva el 10, sin duda. Al menos para mí. Y como soy yo la que hace este post...
La Voz. Merece estar en este apartado por varios motivos. Uno, porque ha conseguido alcanzar cuotas de audiencia que pensábamos que no veríamos más. Dos, por descubrir que Melendi no es alternativo. Tres, por mostrarnos que el estilista de Jesús Vázquez hiperventila al vestirlo. Cuatro, porque resulta que "España es heavy" y no lo sabíamos.
Los Juegos Olímpicos. La ceremonia de apertura gustó mucho en la redacción del Huff, en especial el momentazo Reina Isabel II y James Bond. A mí, y al mundo entero también pareció gustarle a juzgar por los índices de audiencia mundiales.
Isabel. A punto estuvimos de no verla, por esa pericia que TVE ha demostrado en los últimos tiempos. La serie ha demostrado, una vez más, el talento que tienen muchos guionistas españoles (¡¡¡ese Javier Olivares!!!), que no siempre aparecen en los títulos de crédito, en las entrevistas, en las menciones. Isabel es una obra de altura, una buena serie de ficción histórica, que le ha dado a TVE buenos resultados de audiencia. Así de simple.
LO PEOR... o no...
Gandía Shore, ese horror arrebatador. Cuando creíamos que todos los analfabetos, todas las chonis, todos los poligoneros y todos los tróspidos, habían salido YA en la tele, llega esta copia española de Jersey Shore. Para los cultivados, ahí va un resumen: tetes, tetas y nanos, semi vestidos, juntos en una casa de la playa de Gandía. Salen a ligar, se magrean, hacen apología de la ignorancia y de las patadas al diccionario y contribuyen a las delicias de dos tipos de espectadores: los que se ven reflejados en ellos, y matarían por estar en su lugar. Y los que desde la atalaya los contemplan como diciendo, "dios mío, qué chusma, qué bien que yo soy como soy, con mis aficiones reputadas, viendo cómo interactúan los lerdos del mundos". En este grupo están muchos de ustedes, no se engañen. Y buena parte de la redacción del Huff, que será muy cool, sí, pero que me consta que de vez en cuando baja a las cloacas. Y estaría yo también si no tuviera que ver este espacio POR OBLIGACIÓN.
La bajada a los infiernos de RTVE. Lo he dicho casi todo sobre este tema en post anteriores en el HuffPost.
Pero hay algo que quiero añadir: Bertín Osborne ha sacado disco. Bertín ha hecho comentarios xenófobos (Momento Sálvame de Luxe de este mes) ha contado chistes homófobos (Bertiniños, Intereconomia). Bertín tiene en cartel una obra de teatro con Arévalo, Más mellizos que nunca, se llama. Allí se dicen frases como estas:
Y ustedes se preguntarán, ¿y? Pues que además, Bertín, el mismo de antes, presenta un programa solidario en La 2, esa cadena pública y multicultural y alternativa. Ahí lo dejo.
Caso La Noria. Justo un año después de que Pablo Herreros, un bloguero sin vinculaciones televisivas, lograra que los anunciantes retiraran su publicidad del programa La Noria, la cadena que lo emitía, Tele 5, se querelló contra él. Pablo Herreros lo cuenta todo y muy bien en este post.
Tele 5 retiró la demanda, afortunadamente, quizá porque la repercusión que tuvo la medida volvió a alertarlos: no son dioses que todo lo pueden, y pese a que tengan derecho a hacer la televisión que les de la gana, el resto de los mortales tenemos derecho a soliviantarlos, mortificarlos, o simplemente, despellejarlos.
¿Quién quiere casarse con mi hijo? Estreno, enero del 2012. Antes de que todo el mundo se diera cuenta de lo guionizado, lo ficcionado y lo teatralizado que está el programa de los tróspidos (sublime término acuñado por el Hematocrítico), los espectadores sesudos que se asomaban por curiosidad no daban crédito. Después de saberlo, o de intuirlo, siguen sin dar crédito. Pero la verdad es que ellos, esos espectadores, no le importan a Cuatro, la cadena que lo acoge, ni a los realizadores de este espacio, en cuya web podemos encontrar incluso un resumen de las frases inconmensurables de los protagonistas.
A mi lo que me entusiasma es ver a Lujan Arguelles, la presentadora, vestida de alta costura para revolcarse en el estercolero. Me encanta...
El caso Bretón. Ana Rosa Quintana y Susana Griso volvieron de vacaciones de verano antes de lo previsto para ponerse al frente de sus dos espacios matinales. Razones: el caso Bretón cobraba dimensiones insólitas, con exclusivas y noticias de alcance y el tema iba a ser EL TEMA de la temporada. Tele 5, en su línea de no dejar escapar ni un detalle escabroso, ni un vecino-familiar-implicado que tuviera algo que comentar, puso en bucle el famoso vídeo en el que el padre de los niños entra y sale del famoso parque, captado por las cámaras de seguridad. Se ha dicho de todo, por todos y a todas horas, rememorando tiempos remotos como el de las pobres niñas de Alcàsser. Sobreinformación que ha confundido más aún a la opinión pública. Ahí lo dejo, también.
LOS MOMENTAZOS
¿Te ves oxidada? Mariló Montero, en la entrevista más tensa que recuerdo haber visto en televisión, se lo espetó a una estupefacta Anne Igartiburu el día que la invitó a su plató de las mañanas para promocionar +Gente.
Zas, en toda la boca.
Las preguntas son, ¿por qué lo hizo? ¿Cuál era el motivo real del malestar de Mariló? ¿Tenía previsto machacarla, o fue algo improvisado? Las respuestas las sabemos sólo Mariló y yo. Pero no estoy autorizada a desvelarlas...
El Rey, semi apoyado en la mesa. Era la primera vez en la historia que Don Juan Carlos no aparecía sentado en su silla poderosa. Así que sí, fue un gran momento que, según nos explicaron al día siguiente en el telediario de TVE (sí, sí, NOS LO EXPLICARON), el gesto quería mostrarnos que el rey se ha puesto al día... Como bien pueden imaginar, Twitter ardió de lo lindo con su mensaje, menos seguido, por cierto, que en años anteriores, pese a esta revolucionaria y medidísima puesta en escena. Me quedo con este tuit
El visionario Herman Tertsh. Como ya saben todos, el amigo del Gran Wyoming tiene mesa reservada desde hace tiempo en Telemadrid, esa cadena pública a punto de ser finiquitada por los mismos que la han llevado al desastre financiero y de audiencia. Lo que no sé si saben ustedes es que Herman es mejor periodista que otros y que otras y su sabiduría le llevó a grabar, ANTES DE LA HUELGA general, un vaticinio sobre cómo discurriría la jornada reivindicativa.
¿Porqué? Son cosas de Herman, hechas para mentes más elevadas que las suyas, lo siento.
EPÍLOGO
Preguntas que nadie se hace pero yo sí:
- ¿Qué fue del acuerdo millonario entre la Pantoja, que ya es abuela, y Tele 5 para hacer entrevistas, galas, series, y merendolas, eh? ¿Pagará Tele 5 los 5 millones de euros que la Pantoja le pide en una demanda?
- ¿Qué va a pasar con Pilar Rubio y su tendencia a aplastar programas?
- ¿Era necesario que TVE sacara del baúl a Mari Carmen y sus muñecos el día de Nochebuena?
- ¿Era necesario que Paz Padilla luciera ese escote imposible, mientras se sucedían los gags tipo Escenas de matrimonio, en Tele 5?
- ¿Hay vida en el humor después de esta felicitación televisiva?