La joya galardonada del pueblo con la primera cartuja de España
Ideal para una escapada.
Los aficionados a la buena mesa se guían en muchas ocasiones por las estrellas Michelin que atesoran los establecimientos hoteleros. Ahora, muchos viajeros podrán también tener como referencia las llaves Michelin, con las que acaba de premiar a los hoteles que proporcionan experiencias inigualables.
En concreto, recibir una llave indica que la estancia es muy especial, puede ofrecer algo diferente o simplemente ser uno de los mejores de su categoría. Dos significa una vivencia excepcional y tres, que el alojamiento es único.
En esta primera edición de las llaves Michelin en España solo cinco hoteles han conseguido tres. Uno de ells es Terra Dominicata – Hotel & Winery en Escaladei, en Tarragona (Cataluña).
"Cuando en el siglo XII los monjes cartujanos fundaron su monasterio a los pies de la Sierra del Montsant nos enseñaron el camino. Ahora hemos rehabilitado su granja, donde cultivaban sus vides, olivos y huertos para ofrecer una estancia única en un paraje excepcional", indican en la web del hotel, que dispone de 26 habitaciones.
"Además del hotel, cuenta con su propia bodega donde elabora los vinos de la finca y donde nuestros huéspedes podrán conocer de primera mano cómo se elaboran los vinos del Priorat", agregan.
La de Escaladei está considerada como la primera cartuja de España. Monjes de la Orden de la Cartuja llegados desde la Provenza en el siglo XII la fundaron en un paisaje enmarcado por la Sierra de Montsant.
Allí se cuenta que un pastor soñó con unos ángeles que subían al cielo por una escalera apoyada en el tronco de un pino, y de ahí el nombre de Escaladei o "escalera de Dios".
"La Cartuja subsistió hasta el 1835 atravesando épocas de gran esplendor. Durante siete siglos los monjes hicieron poblar campos, construir molinos y difundieron el cultivo de la viña [...] Con la desamortización de Mendizábal se vieron forzados a huir, privados por decreto de sus tierras, y abandonaron celdas y claustros, la iglesia y la hospedería. En tan sólo dos años la majestuosa cartuja quedó convertida en un montón de escombros debido a los saqueos", cuentan en la web de Turismo del Priorat.