Estos son los factores a tener en cuenta si te decantas por el intercambio de casas en vacaciones

Pasada la Semana Santa y con temperaturas propias de meses de verano, es más que probable que hayas empezado a planificar tus próximas vacaciones. Una escapada a un país paradisiaco o exótico, una semana conociendo todos los rincones de una ciudad de película o varios días recorriendo las calles de ese lugar que tienes que visitar al menos una vez en la vida. 

Son varios los planes para viajar tu solo, en pareja o en familia. Una vez escogido el destino, el siguiente paso es reservar el transporte y el alojamiento; este último uno de los mayores quebraderos de cabeza, más si el presupuesto es ajustado. 

Ante esta situación, una tendencia que ya se viene observando años atrás y que se espera que entre con fuerza en este verano de 2024 es el intercambio de casas, la experiencia turística en la que tú como viajero te alojas en la casa de una persona mientras esta ocupa la tuya. La fórmula es de las más económicas en materia de alojamiento, pero conviene tener en cuenta una serie de factores antes de lanzarte a la aventura.

¿Tu seguro cubre el intercambio de casas? 

En lo que respecta al seguro, desde la web Acierto.es advierten de la importancia de diferenciar el intercambio de casas que se realiza desde una plataforma o app digital y el que se realiza entre particulares, sin intermediarios. 

Así, plataformas de intercambio de casas en vacaciones como HomeExchange, Intervac o HomeforHome cuentan con sus pólizas. En el caso de HomeExchange, el anfitrión podrá hacer uso de la fianza de 500 euros depositada por el invitado de presentarse daños, siempre que así lo considere la empresa. Además ofrecen cobertura en caso de daños materiales y protección por robo. 

En lo que respecta al invitado, disponen de una cobertura en caso de anulación, garantía de no conformidad y por daños materiales accidentales, con una franquicia de 100 euros. 

¿Qué dice la ley sobre el intercambio de casas de vacaciones? 

En lo que respecta a la ley, siguiendo a Ethic, al no haber una contraprestación económica, el intercambio de casas de vacaciones no viene recogido como tal en la Ley de Propiedad Horizontal ni en la de Arrendamientos Urbanos. 

De acuerdo a la citada web, el artículo 7.2 de la Ley de Propiedad Horizontal, de estar el piso en una finca urbana exigen el cese inmediato de "actividades prohibidas en los estatutos, que resulten dañosas para la finca o que contravengan las disposiciones generales sobre actividades molestas, insalubres, nocivas, peligrosas o ilícitas". Hasta el momento, el intercambio de casas en España no está sujeto a la regulación vigente sobre los alquileres a corto plazo. 

El lado negativo del intercambio de casas

Más allá de la incertidumbre de que extraños se alojen en tu casa sin estar tú presente, uno de los inconvenientes es cuadrar las fechas, y es que es complicado que te vayas los días que hayas pensado, tendrás que llegar a un acuerdo con la otra parte. 

Desde la web Hosticasa apuntan a que a la falta de una regulación concreta se suma el vacío en relación a las quejas. A diferencia de los apartamentos, hoteles o viviendas vacacionales que cuenta con servicios de soporte en caso de que diversos servicios se encuentren en mal estado, al intercambiar tu casa es complicado encontrar una solución si presentas una queja porque la ducha pierda agua o el aire acondicionado no funciona.