El único pueblo-museo del mundo está en España y más concretamente se oculta en este rincón andaluz
Sus calles no tienen nada que envidiar a los pasillos de un museo.
Andalucía es una tierra de incontables tesoros, un paraíso donde los paisajes de ensueño se mezclan con siglos de historia y tradición. Desde sus imponentes sierras hasta sus cosas doradas, esta región del sur de España es hogar de una infinidad de municipios que invitan a perderse entre sus calles adoquinadas. Entre todos ellos, destaca un lugar único en el mundo que ha hecho del arte su razón de ser.
Se trata de Genalguacil, un pequeño pueblo enclavado en la serranía de Ronda que, a pesar de contar con menos de 500 habitantes, se consolida como una de las localidades más bonitas de Andalucía y de toda España. Como explica su propio Ayuntamiento, este puede presumir de ser el primer y único Pueblo Museo habitado de todo el mundo. Este rincón andaluz ha logrado convertir sus calles en una galería de arte al aire libre, atrayendo a visitantes internacionales.
Todo ello gracias a las obras de arte contemporáneo que adornan cada rincón de la localidad. Desde 1994, cada dos años, Genalguacil celebra sus “Encuentros de Arte”, un evento que transforma el pueblo en un hervidero de creatividad. Durante dos semanas, artistas seleccionados de distintas disciplinas son invitados a convivir con los vecinos mientras elaboran sus obras, las cuales permanecen en el pueblo como parte del patrimonio cultural.
Contra el despoblamiento
Lo que distingue a este municipio malagueño es su fusión entre lo tradicional y lo moderno. No deja de ser un pueblo pequeño con un trazado de callejuelas y viviendas blancas en las que se puede apreciar su herencia musulmana, pero a su vez es una de las capitales internacionales más populares del arte. Esculturas, murales y diversas intervenciones artísticas adornan los rincones de sus calles, convirtiendo cada paseo en una experiencia visual única.
Esta apuesta por el arte contemporáneo ha revitalizado la economía local, atrayendo a turistas en busca de una experiencia diferente. Además, la iniciativa ha reforzado el sentido de comunidad entre los habitantes, quienes muchas veces se involucran en los procesos creativos. Esto a su vez es una herramienta eficaz para combatir el despoblamiento que amenaza a tantos municipios rurales del país, demostrando que lo tradicional y lo moderno pueden coexistir.
Además del arte, el entorno natural es otro de los grandes atractivos de Genalguacil. Rodeado de frondosos bosques, ríos cristalinos y paisajes montañosos, es todo un paraíso donde perderse un rato y desconectar. Todo ello sumado al encanto de ser el único pueblo-museo del mundo, ofreciendo una experiencia inmersiva que desafía las expectativas de lo que un pequeño pueblo puede llegar a ser. Por ello, este municipio sigue demostrando que la creatividad y la vida rural se potencian mutuamente, creando un espacio único que cautiva a quienes lo visitan.