El tesoro escondido de Teruel: el pueblo otoñal de la 'Toscana española' con decenas de piscinas naturales

El tesoro escondido de Teruel: el pueblo otoñal de la 'Toscana española' con decenas de piscinas naturales

Una localidad llena de paisajes de ensueño y de naturaleza.

Beceite (Teruel).Getty Images

Teruel, a menudo llamada la gran olvidada de España, es una provincia que guarda en su interior algunos de los paisajes más sorprendentes y auténticos del país. Bajo el lema “Teruel existe”, esta región aragonesa ha luchado por reivindicar su riqueza cultural, histórica y natural. Desde montañas escarpadas hasta pueblos medievales llenos de historia, Teruel es un refugio para quienes buscan belleza y tranquilidad en estado puro.

En pleno corazón de la comarca del Matarraña se esconde un pequeño paraíso que muchos consideran una de las joyas oculta de España. Estamos hablando de Beceite, un pintoresco pueblo que en otoño se transforma en un paisaje de ensueño, digno de la famosa Toscana italiana. Rodeado de montañas, bosques y valles, esta localidad atrae a visitantes no solo por su encanto medieval, sino también por la naturaleza espectacular de la que parece emerger. 

Lo que hace único a este pueblo es su privilegiada ubicación entre las sierras turolenses y sus decenas de piscinas naturales, un conjunto de pozas y saltos de agua verdosa y cristalina que brotan entre las rocas y los bosques de pinos. Estas piscinas, que se forman a lo largo del río Matarraña y sus afluentes, son algunas de las joyas por las que la revista especializada National Geographic ha apodado al lugar como la Toscana española.

La ruta más popular

El acceso a muchas de estas pozas naturales es a través de rutas de senderismo que adentran en los bosques y desfiladeros de la zona. En este contexto, una de las más famosas y frecuentadas es la ruta del Parrizal, la cual sigue el curso del río Matarraña y cuenta con pasarelas de madera acondicionadas que facilitan la caminata. Esta ruta está perfectamente señalizada y lleva a los excursionistas a través de un paisaje espectacular de cañones, gargantas y exuberante vegetación. 

A medida que nos adentramos cada vez más en el sendero encontraremos varias pozas de agua cristalina e impresionantes piscinas naturales que, aunque en muchas de ellas no esté permitido el baño, se consolidan como lugares perfectos para descansar. Uno de los lugares más destacados para refrescarse es el espectacular Salto de la Portellada, el cual cuenta con una cascada de más de 20 metros de altura que con el paso de los años ha erosionado la roca viva hasta excavar una gran piscina circular.

Otra de las grandes destacadas es la Piscina Natural de L’Assut, la cual ha sido acondicionada aprovechando el paso del río. A pesar de contar con escaleras de acero, el agua cristalina nos permite apreciar como el fondo está cubierto de lecho pedregoso fruto de la vegetación ribereña de la zona, conservando parte de ese encanto natural. Esta piscina surge del estancamiento del agua debido a una presa, la cual es utilizada por muchos como un gran trampolín. 

Finalmente, el embalse de Pena es otro de los lugares más emblemáticos de Beceite. Se trata de un pantano de aguas azules y cristalinas que contrastan con el verde de los bosques que lo rodean. Construido en 1930 se consolida como uno de los embalses más antiguos de la provincia de Teruel. Este lugar es ideal no solo para darse un baño refrescante en temporada de calor, sino también para la práctica de deportes como el kayak o la pesca.