La crononutrición es un campo que cada vez interesa a más personas y que se centra en estudiar de qué manera el momento en el que ingerimos los alimentos afecta a nuestro organismo.

En este sentido, el nutricionista Luis Zamora dio en Y ahora Sonsoles (Antena 3) señaló hace unos meses algunas claves de cuáles serían los mejores horarios para organizar las comidas principales del día.

"Una hora después de que haya salido el sol, sobre las ocho de mañana, es una de las mejores horas para desayunar", señaló sobre la primera comida del día. 

"El cuerpo ya se ha despertado, las hormonas están preparadas y el cortisol está en su punto álgido", puntualizó.

También aconseja una comida a una hora más temprana de lo que se suele hacer en España: "A la una y media de la tarde es perfecto, o antes de las dos. El cuerpo a esta hora está más preparado y habría menos resistencia a la insulina, menos picos de azúcar".

También recordó que se ha demostrado que cenar más tarde de las nueve de la noche se ha asociado con mayor riesgo cardiovascular. Por eso, sostuvo, "las personas que desayunan antes de las ocho y cenan antes de las ocho tienen un seguro de vida".