Los tés descatalogados en algunos países por sus efectos en hígado y estómago que aún se toman en España

El té es una infusión con interesantes propiedades, puesto que contiene flavonoides, unos polifenoles con potentes propiedades antioxidantes, según la Fundación Española de la Nutrición.

"No aporta valor calórico a no ser que se añada azúcar o leche en su consumo por lo que lo convierte en una buena alternativa a las bebidas gaseosas y azucaradas. Los taninos le confieren el característico sabor amargo y tienen efecto astringente", agregan.

Advierten, por otro lado, de que "contiene una sustancia que impide el aprovechamiento orgánico de la vitamina B1", por lo que quienes lo consumen en grandes cantidades pueden padecer una deficiencia de esta vitamina. Además, hay que tener en cuenta que el té verde puede dificultar la absorción de hierro "por lo que su consumo no estaría indicado en caso de estar atravesando un proceso anémico".

Según la web polaca Pysznosci, hay que andarse con ojo con dos tipos de tés o infusiones "descatalogados en muchos países" pero que aún hay quien consume. Se trata de las infusiones de sen y el té de consuelda.

A la hoja de sen se le atribuyen propiedades laxantes, pero además de que falta evidencia científica sobre sus efectos, su ingesta no es inocua. "En ingestas muy prolongadas, puede llegar a interferir en el equilibrio de algunas sustancias químicas de la sangre, generar problemas en el corazón, debilidad muscular o daños en el hígado", avisan desde 65ymás. 

Presenta muchas contraindicaciones y puede interferir con ciertos medicamentos, por lo que lo mejor es consultar con un profesional de la salud antes de tomarlo.

En el caso de la consuelda, algunos países han prohibido la venta de preparaciones orales con ella y, por ejemplo, y no ha sido aprobada por la Agencia de Medicamentos y Alimentación (FDA) estadounidense. No debería ingerirse y su uso debería restringirse a la forma tópica.