Los médicos pensaban que estaba cansada y realmente le quedaban 90 días de vida
Los primeros síntomas síntomas eran compatibles con los de un estilo de vida ajetreado.
Kahley Schiller es una mujer de 39 años y hace cinco tuvo que ser intervenida por una hepatitis autoinmune. Algunos de los síntomas que presentaba, al principio, los ha recogido el medio italiano Il Mattino. Eran cansancio, náuseas y dificultades respiratorias.
Tal y como recoge el rotativo, en un primer momento los médicos concluyeron que esos síntomas eran compatibles con los de un estilo de vida de lo más ajetreado.
Sin embargo, más adelante, fueron surgiendo otras señales que manifestaba, como que las escleróticas se tornaron algo amarillentas, volvió al hospital. Fue entonces cuando le diagnosticaron la hepatitis y los médicos le informaron de la rapidez con la que necesitaría un trasplante.
"Me dijeron que tenía 90 días de vida y que sólo sobreviviría gracias a una cirugía de trasplante de órganos", ha contado Schiller en uno de los post de su perfil de Instagram.
Y ese trasplante llegó. "Por él, he podido ser madre y criar a mis dos hermosos hijos", ha contado en la misma publicación, en la que también ha agradecido poder seguir siendo "hija, hermana, cuñada, sobrina, tía, prima y amiga".
Finalmente, ha agradecido a su donante haber recibido "regalo de la vida, que es el más preciado que jamás podrías recibir", ha concluido.