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La fruta de los gin tonics que nadie se come es un aliado para mejorar la vista
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La fruta de los gin tonics que nadie se come es un aliado para mejorar la vista

Además, contiene vitaminas B y C.

Una imagen de archivo de una mujer con dos gin tonicsGetty Images

En copa de balón y bien frío. Es uno de los requisitos para preparar correctamente un gin tonic. De esta manera, todos los ingredientes entrarán perfectamente. Como en todo, cada cual le añade las proporciones y los componentes que prefiera. Por norma general, este cóctel lleva ginebra y tónica, aunque también se le pueden añadir algunas bayas.

Algunas de esas bayas son los physalis, aunque también reciben el nombre de alquequenje o fisalis. Se trata de un fruto exótico con un diámetro que no excede los dos centímetros, por norma general. Además de en esta bebida, se emplean en postres y a modo de decoración en otros platos.

Los fisalis, además, cuentan con un potente valor nutricional. Así lo recogen diversos medios y portales de información, tanto nacionales como internaciones. Es el caso del sitio web polaco Pysznosci, en el que apuntan cómo su alto contenido tanto en vitamina A como antioxidantes resultan beneficiosos para la vista.

Una imagen de archivo de fisalisGetty Images/iStockphoto

Por su parte, desde La Voz de Galicia precisan que es un alimento que actúa como antiinflamatorio y laxante natural. Asimismo, indican que cuenta con vitamina C, lo que ayuda a reforzar el sistema inmunológico, vitamina B, que es beneficiosa para el sistema nervioso y la ya mencionada vitamina A.

Gracias a sus ácidos cítricos y málicos, la cabecera gallega apunta que el fisalis son diuréticas y depurativas.

Se puede plantar en casa

Este fruto se puede plantar en casa, para, a continuación, trasladarlo a un jardín o una huerta. Así lo recoge la Cadena COPE, que informa de que es una planta que crece en lugares húmedos y frescos. El que tenga el terreno, puede tratar de empezar este proceso de siembra directamente en la tierra, pero se puede emprender este proyecto en el interior.

Los fisalis agradecen la luz solar directa, aunque puede crecer sin problemas en lugares a los que el sol dé con menos intensidad. La única puntualización que hacen es que, en interiores, al fruto le costará más salir.