La colonoscopia y la prueba en heces son equivalentes para detectar el cáncer colorrectal
El estudio, publicado en 'The Lancet', se ha realizado durante diez años en 57.000 personas.

Un estudio realizado por investigadores del Hospital Clínic-Idibaps de Barcelona y del Hospital Universitario de Canarias demuestra que la prueba de sangre oculta en heces y la colonoscopia tienen una eficacia equivalente para detectar preventivamente el cáncer colorrectal.
Este estudio científico, publicado en la revista The Lancet, ha sido realizado durante diez años en 57.000 personas y demuestra que ambas estrategias, la prueba en heces y la colonoscopia, son igualmente eficaces para detectar preventivamente el cáncer colorrectal.
Para llevar a cabo el estudio comparativo se repartieron aleatoriamente en dos grupos las 57.000 personas participantes en el cribado, con edades comprendidas entre los 50 y los 70 años, y tanto hombres como mujeres.
Los participantes en el ensayo clínico pertenecían a ocho comunidades autónomas: Aragón, Canarias, Cataluña, Galicia, Madrid, Murcia, País Vasco y Comunidad Valenciana.
La participación ciudadana en el cribado ha sido más alta en el grupo de personas que aceptaron la prueba de sangre oculta en heces (40 %) en comparación con el otro grupo, al que se hicieron colonoscopias (32 %), debido a que este último procedimiento es más invasivo.
Han coordinado la investigación el doctor Antoni Castells -director asistencial del Hospital Clínic de Barcelona y catedrático de gastroenterología de la Universidad de Barcelona (UB)-, y el doctor Enrique Quintero -gastroenterólogo del Hospital Universitario de Canarias, y catedrático de la Universidad de la Laguna en Tenerife-.
El proyecto de investigación, denominado Colonprev, ha sido cofinanciado por la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y el Instituto de Salud Carlos III, y se trata del primer estudio en el mundo que compara las dos estrategias.
Según ha afirmado en una rueda de prensa el doctor Antoni Castells, "después de diez años de seguimiento de las personas participantes en el cribado los resultados demuestran que ambas estrategias tienen una eficacia similar en la detección del cáncer colorrectal y en su capacidad para reducir la mortalidad asociada a este tumor".
Los resultados del estudio evidencian que la mortalidad por cáncer colorrectal después de diez años fue similar en ambos grupos, 0,22 % en el de colonoscopia y 0,24 % en el de sangre oculta en heces.
Llamamiento a realizar más pruebas preventivas
El doctor Enrique Quintero ha subrayado, por su parte, que el estudio supone "un avance muy importante" y ha hecho un llamamiento a la población para que "participe más en las pruebas preventivas" puesto que la participación aún es más baja que la media europea: en todo el país es de un 45 % y en Cataluña, de un 50 %.
Sobre el coste de ambos tipos de pruebas, el doctor Castells ha explicado que, mientras que la de sangre oculta en las heces es sólo de 2 a 4 euros, la de la colonoscopia es de unos 150 a 200 euros por test, y aunque ambas son equivalentes por lo que respecta a su eficacia, esta última tiene "unos riesgos determinados" por ser invasiva.
Castells ha coincidido en el llamamiento a aumentar la participación de los ciudadanos puesto que "una detección precoz puede salvar muchas vidas, y nos gustaría que se incentivara" por parte de las instituciones sanitarias.
Sobre las diferencias detectadas entre comunidades autónomas, con una participación superior las del norte y el este y más baja en las de la mitad sur, Castells lo ha atribuido al tiempo transcurrido desde que se iniciaron en cada lugar.
También hay diferencias sobre el sistema utilizado para acceder a las pruebas de sangre oculta en heces, y mientras que en el País Vasco son los médicos de cabecera quienes las proporcionan, en Cataluña son las farmacias las que recogen las muestras de los ciudadanos.
Este cáncer se puede prevenir si se detecta a tiempo
El cáncer de colon es uno de los tumores más frecuentes y una de las principales causas de mortalidad por cáncer. Se desarrolla a partir de lesiones precancerosas llamadas pólipos, que pueden evolucionar hacia un tumor maligno si no se detectan y eliminan a tiempo.
Los investigadores advierten que la detección precoz es clave para prevenir la enfermedad o para diagnosticarla en fases iniciales porque el tratamiento es más efectivo y las posibilidades de curación son más altas.