Descubren un mejor momento para cenar y en España se tiran de los pelos
La hora media para empezar la última comida del día queda muy lejos de la que siguen en el resto de Europa.
Hay quien cena apenas un rato antes de irse a dormir, mientras que otros tantos prefieren cenar pronto, para haber digerido la comida antes de acostarse. Todo ello en un horario que los hay que pueden seguirlo por gusto y otros porque la rutina del día a día o sus horarios laborales así lo pautan.
Sin embargo, una cosa es la práctica y otra la teoría. Varias especialistas en materia de nutrición y dietas han atendido a Vogue precisamente para hablar de este tema y detallar cuál es la hora más óptima para llevar a cabo la última comida del día.
No tienen un consenso, pero sí que coinciden en una serie de puntos. Sobre el momento del día, "la hora ideal para ajustarse al orden cronológico de las hormonas es sobre las ocho de la tarde", ha explicado a la publicación la psiconutricionista Itziar Digón. Ahora bien, no siempre es una posibilidad viable, por lo que indica que lo más recomendable, para ella, es cenar dos o tres horas antes de irse a dormir.
Una opinión similar tiene la nutricionista y doctora Vanessa Risetto. Siguiendo las conclusiones a las que han llegado varios estudios acerca de este tema, la sugerencia que ha dado a Vogue pasa por cenar entre las 17:00 y las 19:00. "Por norma general, recomiendo comer a las dos horas de despertarse y comer algo cada tres o cuatro horas", ha apostillado; sin embargo, si eso no fuera posible, ella invita a dejar de comer "al menos, tres horas antes de acostarse".
España da la nota en Europa
Los horarios que proponen las expertas para cenar no desentonan especialmente con los que ya siguen de media los ciudadanos europeos. Según recoge El Confeidencial, en lugares como Noruega o Finlandia, la última comida del día se suele hacer alrededor de las 16:00 horas.
También entre las 17:00 y las 18:00 lo suelen hacer en Dinamarca, Reino Unido, Alemania, Bélgica e Irlanda. Sin embargo, en España lo más extendido es no empezar la cena hasta las 21:30 o, incluso, 22:30, marcando un ritmo de vida bastante alejado de la media europea.