Corrige este gesto tonto al lavarte los dientes y ahorrarás cientos de euros en el dentista
Tiene que ver con las encías.
Las enfermedades bucodentales son, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en su mayoría, prevenibles. Así lo recoge en una nota que divulgó en su página web en la que, además, señala que "la mayor parte" de esas afecciones son "caries dentales (caries), enfermedades periodontales, pérdida de dientes y cánceres bucodentales".
Aunque, en muchas ocasiones, un lavado de dientes posterior a cada comida puede ayudar a prevenir estas patologías, también hay que tener cuidado con él. Así lo ha explicado Olalla Argibay, que es miembro de la Sociedad Española de Periodoncia (Sepa).
Esta, en una entrevista para La Voz de Galicia, ha difundido algunos errores que solemos cometer a la hora de lavarnos los dientes. Uno de ellos tiene que ver con la fuerza con la que llevamos a cabo este cepillado. "Vivimos acelerados y, a la hora de lavarnos la boca, también", ha empezado a explicar la experta.
La rapidez con la que nos cepillamos también repercute en la fuerza que empleamos para hacerlo. "La tendencia es que si froto más fuerte, ya sale todo", ha continuado Argibay. Y más fuerza, según recoge el ya mencionado rotativo local, no es sinónimo de más efectividad.
Toda esa presión que se ejerce sobre encías y dientes al darle con tanta fuerza puede hacer que estos terminen dañándose. E, incluso, puede llegar a provocar heridas y llagas.
Otras patologías
Las llagas son sólo una de las patologías dentales que existen. Otra de las más comunes es la caries. Esta se produce cuando la placa que recubre la capa superficial de los dientes convierte los azúcares de bebidas y alimentos en ácidos que van, poco a poco, destruyendo el diente.
Otras patologías son la noma, el edentulismo (pérdida de los dientes), etc. Y, según la OMS, "la carga de morbilidad por enfermedades bucodentales y otras enfermedades no transmisibles puede reducirse mediante intervenciones de salud pública dirigidas a los factores de riesgo más comunes".
Estas intervenciones consisten en fomentar una dieta equilibrada, reducir el consumo del alcohol y erradicar el consumo de tabaco.
