Alerta sanitaria por compuestos cancerígenos en el papel higiénico: evita este tipo de rollo
Un estudio de la revista Environmental Science & Technology Letters advierte del peligro en ciudades europeas.
El papel higiénico puede contener ‘contaminantes eternos’, también llamados sustancias perfluorados (PFAs), que pueden estar presentes en multitud de productos de consumos como sartenes, envases de alimentación e incluso en el agua corriente. Y estos contaminantes se acumulan en el organismo y están relacionados con multitud de trastornos de la salud como problemas óseos, obesidad e incluso el cáncer de hígado.
Y la revista Environmental Science & Technology Letters de la Sociedad Americana de Química ha realizado un informe en el que se alerta de una fuente de contaminación en el papel higiénico que debe ser vigilada. El estudio ha visto la luz después de varios estudios en aguas residuales para calcular las partículas persistentes como los PFAs y se advierte que el papel higiénico elaborado con material reciclado puede contener fibras de origen contaminados con PFAs. La revista americana llega a la conclusión que determinados fabricantes añaden productos químicos perjudiciales para la salud para transformar madera en pulpa y luego dicha sustancia permanece en los rollos que llegan a los consumidores.
El estudio se ha realizado en las aguas residuales de grandes ciudades de los cinco grandes continentes del planeta y después también extrajeron muestras de aguas negras de las plantas de tratamiento en Estados Unidos para después medir las sustancias perfluorados.
Para ello, elaboraron una lista de 34 compuestos diferentes y ahí apareció fosfato de polifluoroalquilo (diPAPs), que puede convertirse en un PFA más estable (ácido perfluorooctanoico), que es el potencialmente cancerígeno.
La triangulación de los datos obtenidos en las alcantarillas de las ciudades estudiadas determinó que el papel higiénico contribuye en un 89% en la presencia de los ‘contaminantes eternos’ en Francia y un 35% en Suecia. Una cifra mucho más alta de la que se aprecia en países de Norteamérica. De hecho, el estudio deja ver que en los países de Europa el papel higiénico puede ser la principal fuente de liberación de estos compuestos potencialmente cancerígenos en el medio ambiente.