Adiós a los parches y las nuevas medicinas: un nuevo estudio desvela el mejor método para dejar de fumar
Investigadores de Oxford revisaron multitud de investigaciones.
Dejar de fumar se ha demostrado que supone beneficios para la salud desde el primer momento. Por ejemplo, se acaba de demostrar que dejar el hábito reduce casi de inmediato el desarrollo de fibrilación auricular y, como consecuencia, la posibilidad de desarrollar algunas enfermedades cardiovasculares.
Ahora, unos científicos de Oxford han determinado cuáles son las tres mejores estrategias para dejar de fumar, tras la revisión sistemática de múltiples investigaciones.
"El tabaco es especialmente mortal entre los productos de consumo legales, por lo que es importante buscar ayuda para dejar de fumar. Existe una variedad de formas efectivas de apoyo para dejar de fumar, y la citisina, la vareniclina y los cigarrillos electrónicos son formas basadas en evidencias de aumentar en gran medida las posibilidades de que las personas dejen de fumar con éxito", señaló el investigador Jonathan Livingstone-Banks.
La vareniclina es un medicamento oral recetado para ayudar a dejar de fumar, mientras que la citisina es un fármaco de origen vegetal. Éste tiene una estructura química similar a la nicotina, lo que permite una reducción gradual de la dependencia de ella, según la web griega News24/7.
La investigación resalta que la evidencia respalda que la terapia conductual funciona para dejar de fumar. En julio de este año, la Organización Mundial de la Salud (OMS), aconsejó combinar fármacos con terapia conductual para dejar de fumar.
Concretamente, recomienda intervenciones conductuales, como el asesoramiento breve —de, al menos, 3 minutos, ofrecido de forma sistemática en los centros de atención de salud— junto con un apoyo conductual más intensivo que se base en asesoramiento individual, grupal o telefónico