Marlena: "Vamos al Benidorm Fest porque ahora nos vemos más Miley Cyrus y menos Hannah Montana. Somos más señoronas"
Ana y Carolina dan el salto para intentar representar a España en Eurovisión con 'Amor de verano', un tema pop que ya empieza a sonar en las radios.
El dúo Marlena ha empezado el año 2024 cumpliendo uno de sus grandes sueños: llenar la mítica sala madrileña de La Riviera para un concierto que celebrará en febrero. Lo hará justo después de participar en el Benidorm Fest, la preselección de España para Eurovisión, con su último hit: Amor de verano. La canción, una propuesta pop muy radio friendly, ya está sonando en emisoras como Los 40 Principales.
Ana Legazpi y Carolina Moyano no son unas novatas. Con más de un millón de oyentes mensuales en Spotify, han cantado en festivales de prestigio como el Arenal Sound, el Ribera Sound y el Weekend Beach. "Ahora hemos dado el paso de ir a Benidorm porque nos vemos más Miley Cyrus y menos Hannah Montana. Más señoronas. Da menos yuyu, aunque no es lo mismo cantar en la tele que en los escenarios a los que estamos acostumbradas", admiten en una entrevista con El HuffPost.
Durante la distendida charla, muy espontánea, ambas nos hablan del fuerte protagonismo de las cantantes lesbianas en la industria musical actual. "Cada día hay menos tapujos a la hora de cantar a quien quieres. De todos modos, a mí me ponen muy nerviosa ciertas modas como que Dua Lipa, de repente, se dé un beso con una. No me apetece. No me gusta el abanderamiento falso o artificial", asegura Ana.
También nos desvelan que van a dejar de compartir piso tras un año y medio de convivencia y los secretos del videoclip de su canción, rodado en Tarifa. "Nos bañábamos de verdad, íbamos borrachas de verdad... A mí me encantaría hacer un documental sobre nosotras, cuando seamos superestrellas", cuenta Ana, quien también desvela su incomodidad al ver que se habla sobre ella en la prensa del corazón tras una relación con la influencer Dulceida. "Si te lías con una abogada, esto no pasa", bromea.
- En primer lugar, quiero darlos la enhorabuena por ese sold out que os habéis marcado para vuestro concierto de febrero en La Riviera de Madrid. ¡Felicidades!
Ana: Muchas gracias. Supongo que cuando pase todo, pensaremos: '¡Qué fuerte!'
Carolina: Estamos con un gran subidón por lo de la Riviera, pero es que las entradas para el concierto en la Apolo de Barcelona también están a punto de agotarse. Así que está siendo un principio de año loco.
- ¿Hay alguna sorpresa preparada para esos conciertos del próximo mes?
Ana: Podemos adelantar que van a venir muchos compañeros que se van a subir al escenario con nosotras. Todos han dicho que sí. Y también tocamos con una nueva banda, ya que recientemente Celia Becks se ha unido a nosotras.
Carolina: Marlena viene a dar mucha guerra en este 2024 y va a ser un año de crecimiento para nosotras sobre los escenarios.
- Me pregunto si después de llenar una Riviera se os puede seguir considerando como indies. ¿Os gusta esa etiqueta o renegáis de ella?
Ana: Fíjate que, si vamos a cosas de indies, nos miran mal porque sonamos en la radio. Nos ha pasado, ¿eh?
Carolina: Nosotros no renegamos del indie, aunque yo diría que lo nuestro es pop versátil. En nuestros conciertos hay muchos géneros y mucha variedad.
- ¿Y qué hace un grupo versátil como Marlena en el Benidorm Fest?
Ana: (Ríe). Siempre hemos dicho que este era nuestro año. En los dos anteriores tuvimos reuniones con la oficina para decidir si participábamos o no, pero por entonces estábamos en un punto en el que no sabíamos cómo defender el proyecto y nuestras canciones. Pero este año sí, nos vemos más Miley Cyrus y menos Hannah Montana. Más señoronas. Da menos yuyu ir a ese escenario, porque no es lo mismo cantar en la tele que en los escenarios a los que estamos acostumbradas.
Carolina: También nos ha empujado a aceptar el hecho de que las dos ediciones anteriores del Benidorm Fest han dado credibilidad y fuerza al concepto de Eurovisión. Además, es una plataforma muy guay para dar a conocer nuevos artistas españoles de todas las variedades.
Ana: Sabemos, aún así, que hay mucha gente a la que no le cuadraba que estuviéramos en el Benidorm Fest. Decían: '¿Qué hacen aquí?' El día de la presentación de los candidatos en Sevilla estaba muy nerviosa porque es cierto que nos estamos dirigiendo a otro tipo de público. Es otro modus operandi en nuestra carrera. Pero estamos tranquilas porque la canción ha gustado y ahora lo que se pregunta todo el mundo es cómo la vamos a defender sobre el escenario.
Carolina: Esta aventura genera un vértigo y una responsabilidad, pero también nos pone.
Ana: Nos pone cachondas (ríen).
- Sí, hay muchos interrogantes sobre cómo vais a trasladar esta canción al escenario del Benidorm Fest. Sé que no podéis contar nada, pero adelantadnos algunos detalles, ¡por favor!
Ana: Es un coñazo los secretismos (ríe). Yo diría que va a ser muy colorida y que nos va a a hacer salir de nuestra zona de confort.
Carolina: No vamos a caer en el cliché de playita, camisa hawaiana... Olvidaos de eso. Estamos trabajando con Javier Pageo, que es un crack, y todo lo relativo a la escenografía lo tenemos muy atado.
- Lo que sí podemos decir, sin temor a equivocarnos, es que este es el año de las lesbianas en el Benidorm Fest. En una entrevista en El HuffPost, Yoli Saa nos dijo que al fin las lesbianas estáis ocupando sin tapujos vuestro hueco en la música. ¿Vosotras estáis de acuerdo con esta afirmación?
Ana: Sí, cada día hay menos tapujos. De todos modos, a mí me ponen muy nerviosa las modas. Parece que ahora sí está genial darte un beso con una mujer cuando hay personas que desde pequeñitas hemos ido poco a poco entendiendo que se puede cantar a quien tú quieras.
- ¿Lo de 'las modas' lo dices por OT, ahora que muchos de sus concursantes se muestran abiertamente LGTBIQ+?
Ana: No, eso me encanta. Lo digo por ejemplo por una Dua Lipa que de repente se da un beso con una. Pues no me apetece. No me gusta el abanderamiento falso o artificial. Pero si lo ven niños y niñas porque son sus referentes y pierden el miedo, pues genial.
Carolina: Cada vez más artistas, tanto chicos como chicas, son más naturales y cantan o escriben canciones a las personas que quieren, sin importar el género.
Ana: Pero si este año somos muchas en el Benidorm Fest, a ver cómo se reparten los votos de las lesbianas de España, ¿eh? ¡Ojo! (ríe).
- Cuando siempre hablamos de Eurovisión existe la cuestión de si el público debe elegir la canción que más le gusta o la que cree que mejor puede funcionar en un escaparate internacional como es este certamen. ¿Vosotras qué pensáis?
Ana: Las Marlenas dicen que hay que ir con la esencia y la marca de cada uno. La canción que salga de ti, no la que sea eurovisiva. Me gustó mucho que Måneskin callase la boca ganando en 2021 con una canción que no pegaba nada en Eurovisión.
Carolina: Italia eligió esa canción para el festival porque les gustaba y porque era esencia Måneskin. Y nosotras compusimos Amor de verano no pensando en Benidorm, sino porque forma parte de nuestro estilo de música. Si a la gente le gusta, que nos vote.
- E independientemente de lo que ocurra en el Benidorm Fest, ¿dónde os gustaría ver a Marlena dentro de dos o tres años?
Ana: Uff, con 16.000 personas en un Wizink. Pero completo, ¿eh? Hasta arriba. Y cruzar el charco.
- El Malmö Arena, donde se celebra este año Eurovisión, tiene la misma capacidad que el Wizink. ¿Os poneís nerviosas imaginando esos momentos previos antes de representar a España en el festival?
Carolina: Yo creo que llevaríamos cuatro días sin hablarnos y sin contacto con nadie (ríe).
Ana: Yo estaría estresada porque ya estoy estresada con el Benidorm Fest y saco muy mala hostia. Estaría insoportable.
- Entonces unos días antes no os hacemos entrevistas...
- Ana: No, no (ríe).
Carolina: Y ciertas personas de nuestra oficina no podrían venir a Suecia porque nos pondrían también más nerviosas.
Ana: Mi madre sí, que está loca. Ella ya se está comprando los billetes para Malmö. Para ella es lo más top que hemos hecho en nuestra carrera.
- Oye, sabemos que recientemente os habéis mudado juntas a un pisito. ¿Cómo lleváis la convivencia? ¿No surgen peleillas después de pasar tantas horas juntas?
Ana: Justo nos divorciamos ya.
Carolina: Hemos estado un año y medio juntas y la convivencia ha sido muy buena.
Ana: Somos muy limpias (ríe). Pero ahora ella se va con su novia y... la vida avanza. Me deja sola.
Carolina: Bueno, tú también te vas con... (no termina la frase). Pero ha sido una etapa preciosa y hemos aprendido un montón sobre convivencia sin ningún drama.
Ana: Bueno, algún drama ha habido. Pero por el estrés del curro, principalmente.
- Ana, en estas últimas semanas también has sido protagonista para la prensa del corazón. ¿Cómo llevas que se hable de tu vida privada en los medios?
Ana: Al final es lo que dura un cotilleo. Y lo llevo con mucha cabeza, porque el hate que me ha llegado no os lo podéis imaginar...
- ¿Hate? ¿Por qué?
Ana: Los fandoms a veces son muy traicioneros y abarcan demasiado. La gente no sabe el trasfondo. Nadie sabe nada. Pero hay que poner buena cara y ya está.
Carolina: Lo que más nos ha molestado es cuando dicen que hemos conseguido ciertos logros por algo o por alguien. Y esos objetivos cumplidos no vienen por ninguna arroba. Nos decían 'os aprovecháis', '¡dejad ya de contar mierdas'...
Ana: Mira, te lías con una abogada y se acaba todo antes (ríe). Pero vaya, que me da igual lo que digan. Estoy convencida de lo que hacemos y lo que quiero.
Carolina: Si no estuviéramos convencidas de Marlena y de nuestro proyecto, no hubiéramos sacado Red Flags (canción en la que, de manera implícita, se habla de la historia de Ana con Dulceida).
- Carol, a ti te hemos visto compartiendo en redes momentos muy felices estos días. ¿Qué le pides a este nuevo año?
Carolina: Seguir muy feliz junto a la persona que me ha dado mucha vida este año. Ella es una persona muy fan de nuestro proyecto. Así que espero que esa alegría nos traiga más canciones, que podamos compartir muchos momentos... Que todo vaya bien.
- Por último quiero preguntaros por el videoclip de Amor de verano, que se rodó en Tarifa. Por las imágenes podemos decir que os lo pasasteis muy bien...
Ana: Fue muy guay. Se vino un cámara dos días a Tarifa y le dijimos: 'Graba todo lo que hagamos'. Bebíamos de verdad, nos bañábamos de verdad, íbamos borrachas de verdad... A mí me encantaría hacer un documental sobre nosotras, cuando seamos superestrellas (ríe). Pero con este videoclip queríamos transmitir un poco cómo son nuestras vidas y volver al lugar donde ocurrieron muchas cosas de mi historia. Todo lo que hacemos tiene un trasfondo: los videoclip, las letras de nuestras canciones...