Meghan Markle lo dice todo con el vestido que ha elegido en su viaje a Nigeria
Y más después del paso del príncipe Harry por Reino Unido.
Tras su paso exprés por Londres para participar en algunos eventos de los Juegos Invictus y sin llegar a ver a su padre, el príncipe Harry se reunió con Meghan Markle y juntos pusieron rumbo a Nigeria. Allí tienen previstos varios actos también relacionados con esta competición de veteranos.
Para su primera aparición pública, la duquesa de Sussex eligió una prenda cargada de significado por el nombre que tiene. Llevó un vestido largo de tono rosado de Heidi Merrick, como apunta Page Six, cuyo nombre no parece casual: Windsor.
Ese es precisamente el apellido de la familia de su marido, con quien la relación de ambos ha pasado de gélida a prácticamente inexistente desde que dieron un paso atrás como miembros activos de la realeza, dieran la explosiva entrevista a Oprah Winfrey y protagonizaran un documental de Netflix.
La apretada agenda del rey Carlos III fue el motivo dado para explicar que no hubiera un reencuentro padre-hijo —uno con su hermano Guillermo con o sin Kate Middleton ni se ponía sobre la mesa— en estos días, pese a estar ambos bien cerca. Harry pudo ver a su padre brevemente en febrero, después de que se conociera su diagnóstico de cáncer, pero no ha vuelto a haber ningún acercamiento.
El hijo menor de Carlos III sí estuvo arropado en su paso por Reino Unido por los Spencer, la rama materna de su familia. Sus tíos Charles Spencer, Lady Sarah McCorquodale y Lady Jane Fellowes lo acompañaron en un acto en la Catedral de San Pablo, al que también acudieron sus primos George McCorquodale, Ned Spencer y Louis Spencer, vizconde de Althorp.