Guillermo vuelve al trabajo: su nuevo papel ante el diagnóstico de cáncer de Carlos III y su situación familiar por la convalecencia de Kate Middleton
Tras el anuncia de la enfermedad de su padre, el foco ahora está puesto en el príncipe de Gales, que ha permanecido casi un mes retirado de la vida pública para cuidar a su mujer y sus hijos.
Tal y como anunció el pasado lunes Kensington Palace, el príncipe Guillermo retomará este miércoles sus quehaceres reales. Su agenda para esta jornada incluye la presidencia de una investidura en el castillo de Windsor y la asistencia a la gala benéfica anual de la London Air Ambulance.
La noticia de la vuelta al trabajo del heredero británico no pilló por sorpresa a nadie, ni hizo sospechar nada de lo que iba a suceder horas después. El 29 de enero, Kate Middleton —de la que apenas nada ha trascendido sobre su estado de salud— fue dada de alta del hospital para continuar en su residencia el proceso de recuperación de la cirugía abdominal a la que fue sometida a principios de enero, así que, una semana después, el príncipe de Gales podía ir poco a poco recuperando la normalidad de su vida.
Hasta que por la tarde, la actualidad de la institución dio un vuelco con un comunicado que anunciaba el diagnóstico de cáncer del rey Carlos III. Según informaba la casa real, el tumor se había descubierto durante la reciente intervención de próstata a la que se sometió hace apenas dos semanas. El monarca ya ha empezado a recibir tratamiento —pero se desconoce el diagnóstico exacto del cáncer— y aunque, por recomendación de los médicos, ha tenido que cancelar todos sus compromisos públicos, continuará con el trabajo de despacho.
La enfermedad del rey de los británicos ha vuelto a alterar el día a día de la familia real, que en las últimas semanas se ha visto sacudida por los problemas de salud de la princesa de Gales, que permanecerá de baja hasta después de Semana Santa, que coincidieron en el tiempo con la operación de Carlos III, y ahora el nuevo diagnóstico de cáncer.
Guillermo, entre el cuidado de su familia y sus obligaciones como heredero
Desde el palacio de Buckingham han querido dejar claro que, aunque Carlos III no pueda asumir ninguna actividad presencial, seguirá despachando los asuntos de Estado y mantendrá sus encuentros semanales con el primer ministro, por lo que no es necesario ningún reajuste institucional. Las primeras informaciones apuntaban a que sería la reina consorte, Camila, la que asumiría el papel visible, sustituyendo a su marido en la mayoría de actos, pero en la tarde del martes el matrimonio puso rumbo a la casa de campo de Sandringham, donde el rey parece que continuará el tratamiento.
Por este mismo motivo, por repartir el peso de la corona, Guillermo, que se encontraba 'de baja' desde el 16 de enero, ha tenido que reincorporarse a su puesto de trabajo y ahora le toca compaginar sus compromisos como heredero —aunque contará con la ayuda del resto de miembros de la casa real en activo, es decir, la princesa Ana y el príncipe Eduardo— con los cuidados de sus hijos y su mujer.
Existe gran expectación por esa primera aparición pública del príncipe de Gales al que, desde que decidió volcarse en el cuidado de su mujer, solo se le ha visto una vez. Fue el pasado 18 de enero, con gesto serio y rictus de preocupación, a la salida de la London Clinic donde su mujer permanecía ingresada.
Uno de los consejeros de Estado de Carlos III
Aunque, de momento, no se baraja esa posibilidad, en el caso de que la enfermedad de Carlos III le incapacitase para desarrollar cualquier de sus funciones públicas como jefe de Estado, la responsabilidad y competencias del rey pasarían a manos de sus Consejeros de Estado, miembros de alto rango de la familia real británica en quienes el monarca puede delegar y revocar cometidos reales.
Dentro de esa lista se encuentran la reina consorte, Camila: el príncipe de Gales, Guillermo; la hermana del rey, la princesa Anna; y su hermano pequeño, el príncipe Eduardo. El príncipe Harry y el príncipe Andrés fueron retirados de manera institucional de ella después de dejar de ser miembros activos de la corona: el primero por haber abandonado Reino Unido para instalarse en EEUU y el segundo por las causas judiciales abiertas contra él en el caso Epstein.