Carlos III dedica un mensaje a los médicos y sanitarios en su tratamiento contra el cáncer en su discurso de Navidad
"Me apoyaron a mí y a otros miembros de mi familia en las incertidumbres y ansiedades de la enfermedad", ha señalado.
Este 25 de diciembre, en su tradicional mensaje navideño, el rey Carlos III ha querido agradecer el trato médico recibido por él y su familia durante este año, en el que tanto él como la princesa de Gales Kate Middleton han sido diagnosticados de cáncer.
El monarca de 76 años se refirió a "los miles de profesionales y voluntarios en el Reino Unido y en toda la Commonwealth que, con su habilidad y la bondad de su corazón, cuidan a los demás, a menudo a un costo para ellos mismos".
"Todos pasamos por alguna forma de sufrimiento en alguna etapa de nuestra vida, ya sea mental o físico", afirmó el monarca, que desde febrero está en tratamiento oncológico.
"El grado en que nos ayudamos unos a otros –y recibimos apoyo de los demás, seamos personas de fe o no– es una medida de nuestra civilización como naciones", dijo.
"Desde un punto de vista personal, quiero expresar un agradecimiento especial y sincero a los médicos y enfermeros desinteresados que, este año, me apoyaron a mí y a otros miembros de mi familia en las incertidumbres y ansiedades de la enfermedad, y contribuyeron a proporcionar la fuerza, el cuidado y el consuelo que necesitábamos", declaró.
Carlos III también mostró durante su mensaje su gratitud a todos los que les ofrecieron "sus amables palabras de simpatía y aliento".
El mensaje hacia la salud y la importancia del personal sanitario también ha estado muy presente en la elección del lugar donde se ha grabado: la capilla de Fitzrovia. Además de ser un edificio no perteneciente a la corona británica, originalmente formaba parte del Hospital Middlesex, que fue demolido y donde la princesa Diana inauguró el primer pabellón de Londres dedicado a los enfermos de sida. Actualmente, el edificio está abierto al público y destaca por su decoración en estilo neogótico con más de 500 estrellas en un techo de pan de oro.
Se trata de la primera vez en 18 años, desde 2006, que el mensaje se graba en un lugar ajeno a las residencias reales. Entonces Isabel II se filmó en la Catedral de Southwark, también en la capital británica.
Un mensaje por la paz y los conflictos globales
Además del mensaje por la sanidad, el rey Carlos III ha querido mandar un mensaje de paz tras recordar a los veteranos que conoció en junio durante el 80º aniversario del Día-D de la segunda Guerra Mundial, con los que, según él, recordó que "esos trágicos acontecimientos rara vez ocurren en la era moderna".
"Sin embargo, en este día de Navidad no podemos dejar de pensar en aquellos para quienes los efectos devastadores del conflicto –en Oriente Medio, en Europa Central, en África y en otros lugares– suponen una amenaza diaria para la vida y el sustento", recalcó.
Aprovechó la ocasión para agradecer la labor "las organizaciones humanitarias que trabajan incansablemente para llevar ayuda vital" y reflexionó que el ejemplo que dio Jesús al ayudar a los que sufren "es atemporal y universal".
Como líder de la Commonwealth, también ha aprovechado para lanzar un mensaje sobre "cómo la diversidad de cultura, etnia y fe proporciona fuerza, no debilidad".
"Una vez más, escuchar es un tema recurrente en la historia de la Natividad. María, la madre de Jesús, escuchó al Ángel que le reveló un futuro diferente lleno de esperanza para todas las personas", añadió
"Esto sigue siendo cierto hoy para la gente de buena voluntad de todo el mundo. Y es con esto en mente que les deseo a ustedes y a todos sus seres queridos una Navidad llena de alegría y paz", concluyó el monarca.
